Ya no tienen nada que ofrecer

ANDRÉS GÓMEZ

Allá por el 2005 terminaron de madurar las ideas que hasta el 2020 sirvieron al Movimiento Al Socialismo para llegar y sostenerse en el poder. Hoy, todas ellas están agotadas.

Constituyente y nueva Constitución. En las marchas de los pueblos indígenas del oriente nacieron las ideas de Asamblea Constituyente y nueva Constitución. Bastante gente creyó que era el camino para resolver los problemas acuciantes del país. No fue así.

La Constitución fue violada e incumplida por sus propios impulsores. Hubo nueva Constitución, pero no nueva realidad. ¿Requiere Bolivia otra Constitución? No. El verbo para traducirse en realidad necesita ejecutores apegados a los principios democráticos.

Vivir bien. Aristóteles plantea, en su libro “Política”, la idea del “vivir bien” como un tema central de la ética y la convivencia en una comunidad política (polis). A mi juicio, la describe como una filosofía de vida de uno con muchos, de muchos entre muchos y de muchos con uno.

Esta filosofía de vida fue repetida a diario por los gobernantes, pero nunca lo entendieron.

Nacionalización. Nació de la denominada Agenda Octubre 2003. El régimen del MAS nacionalizó el gas que heredó de los neoliberales.

Hasta 2019, Bolivia tenía reservas probadas de gas de 6,21 TCF. A la fecha, YPFB no informa sobre las reservas. Importa gasolina y diésel por el valor de 11,8 millones de dólares por día para atender la demanda interna. ¿Va bien alguna de las empresas nacionalizadas?

Modelo económico social comunitario productivo. Funcionó mientras se mantuvo el denominado “superciclo” de las materias primas con la plena incorporación de China al comercio mundial. Alcanzó su auge entre 2008 y 2013. Causó un período de sostenido crecimiento en Sudamérica, donde los commodities constituyen un 74% de las exportaciones de productos primarios. En Bolivia superan el 80%.

En mayo de 2013, economistas del país y el exterior alertaron que la caída del precio de las materias primas tendrá un claro impacto en la economía regional y, por supuesto, boliviana.

En el buen momento, las reservas internacionales bolivianas sumaron más 15 mil millones de dólares. En ese momento, el BCB informaba casi en tiempo real sobre el crecimiento. Hoy, oculta información sobre la caída. Suena paradójico que el supuesto autor del milagro económico sea el causante de la crisis.

Estado Plurinacional. La Constituyente cambió el nombre de República de Bolivia por el de Estado Plurinacional. Lo presentó como el rector de la convivencia entre las 36 naciones. La realidad es otra. El avasallamiento a pueblos indígenas del oriente puso camino a la extinción a “naciones” que, inexplicablemente, carecen de protección del Estado Plurinacional.

Algo peor, se tornó tan excluyente como el Estado colonial que el MAS critica porque excluyó a todo aquel que no se autoidentifica como indígena; se convirtió en represor de bolivianos que piensan diferente y que no aceptan símbolos y rituales que no los representan.

Lucha contra la corrupción.- La prueba del fracaso de esta propuesta la dio el mismo gobierno masista el 19 de junio pasado, cuando presentó el proyecto de Ley de Creación del Sistema de Gestión de Riesgos para la Prevención y Lucha Contra la Corrupción.

¿En qué quedó la Política Nacional de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción presentada en julio de 2009 por el propio gobierno masista? En los papeles. Según encuestas, la mayoría de la sociedad siente que la corrupción engulle a los gobernantes.

Lucha antidroga.– Enero 2006, Evo Morales, presidente esa vez, anunció el cambio total de la política antidrogas bajo el eslogan “coca sí, cocaína no”. Lo bautizó como la “nacionalización de la política contra el narcotráfico”. Hizo creer que sus intereses como productor de coca era un interés nacional y expulsó a la DEA.

Hoy, hay más coca y más cocaína. Hoy, los líderes masistas se acusan de encubrir al narcotráfico y admiten que penetró el Estado Plurinacional a tal punto que los “narcos” exportan cocaína (media tonelada) desde el aeropuerto número uno de Bolivia. Hasta la fecha, la Felcn no halla al dueño de ese cargamento, pero el país deduce quién es.

Justicia.- “Reconocemos que la transformación de la justicia es un tema pendiente”, dijo el presidente Arce el pasado 16 de mayo. De ese modo, reconoció otro fracaso.

Madre tierra.- En diciembre de 2010, el masismo aprobó la “Ley de derechos de la madre tierra” para establecer las obligaciones del Estado Plurinacional y de la sociedad respecto al medio ambiente para el vivir bien de las generaciones presentes y futuras. Hoy, tolera a sus principales aliados: cooperativistas mineros y cocaleros, acabar con la madre tierra.

Después de haber fracasado en todo, ¿qué más puede ofrecer el MAS? Nada. ¡Ah! Sí. Tiene algo que ofrecer: violencia, persecución y trampas para no salir del poder.

ANDRÉS GÓMEZ VELA

Periodista y Abogado

*NdE: Los textos reproducidos en este espacio de opinión son de absoluta responsabilidad de sus autores y no comprometen la línea editorial Liberal y Conservadora de VISOR21