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“Si tenemos un club, tenemos todo el derecho (…) Evo Morales puede ser presidente de la Federación Boliviana de Fútbol”. La frase del senador del MAS Leonardo Loza proyectó el futuro, pese a que aún no se concretó el presente. Hace casi dos semanas el expresidente de Bolivia anunció el inicio de la “transferencia legal” del club Palmaflor a las Seis Federaciones del Trópico. Para sellar el acuerdo se deben superar obstáculos legales que pueden perjudicar al equipo, según expertos.
Uno de esos inconvenientes está en la Ley de Otorgación de Personalidades Jurídicas 351 y su decreto reglamentario 1597. “La transferencia” expone a la institución deportiva a la pérdida de su personería jurídica. “Hay una infracción administrativa. Ya está demostrado sólo con el anuncio. El tema de si es gratuito o no, eso es lo de menos. El tema es que se puede violar el artículo 11 de la Ley 351”, explicó Johan Zambrana, abogado máster en derecho deportivo.
El artículo 11, de la prohibición de transferencia de personalidad jurídica, “prohíbe toda forma de transferencia y/o comercialización de la personalidad jurídica de las personas colectivas”. Mientras que el artículo 19 del decreto supremo reglamentario 1597 consigna la revocatoria en su inciso d): “Por transferencia o comercialización de la personalidad jurídica”.
“En Bolivia, ningún club, incluyendo a la FBF, puede estar por encima de las normas nacionales, eso también lo protege la FIFA en su propio estatuto y su reglamento. La federación también reconoce al Estado boliviano como el que da la personería jurídica”, sustentó Zambrana.
El lunes 14 de este mes, los dirigentes del club Palmaflor se reunieron con Evo Morales, en Cochabamba. Un día después se informó que se acordó la transferencia del club profesional cochabambino a las Seis Federaciones del Trópico. “Es una decisión dirigencial”, opinó escuetamente Julio César Mollo, extitular del cuadro valluno. En 2020, él lideró a Las Fieras que jugaron la Copa Sudamericana.
Una fuente del grupo de cocaleros, que trabaja en la cesión, no identificó “ningún problema porque se hicieron las consultas jurídicas de cómo proceder y organizarnos”.
¿La Copa, en riesgo?
“Como el 99% de los clubes de Bolivia, Palmaflor es una asociación sin fines de lucro, así es que a una asociación sin fines de lucro no se la puede transferir, debería ser simplemente un cambio de directorio”, coincidió Ricardo Alípaz, abogado experto en derecho deportivo.
Para Zambrana, “el primer principio es que las asociaciones civiles, sin fines de lucro, no pueden transferir su personalidad jurídica, entonces, Palmaflor incumpliría. ¿Quién debe revocar esa personería? El gobernador de Cochabamba y si el gobernador no revoca, puede intervenir el Viceministerio de Autonomía, a través de la dirección de la personería jurídica dependiente del Ministerio de la Presidencia”.
Según el letrado, en caso de revocarse la personería, “la FBF tendría que proceder a desafiliar al club Palmaflor y, por lo tanto, perdería su cupo a la Copa Sudamericana de este año”.
“No quería” el traspaso
Otro expresidente del club, Édgar Aduviri, lamentó la transferencia. “Ni modo, lo siento, no quería, pero yo solo ¿qué puedo hacer?. Yo subí al equipo desde la B, pasamos a la Simón Bolívar y a la profesional y ahora… ni modo”, se apenó el exmandamás de Palmaflor dedicado a la agricultura.
Página Siete intentó comunicarse también con los actuales dirigentes del equipo valluno, pero ninguno accedió. Una fuente explicó que los trabajadores recibieron órdenes de no presentarse en las oficinas de la institución. Periodistas deportivos cochabambinos contaron que vieron a Evo Morales, a Loza y al exministro de Deportes Tito Montaño ingresar casi todos los días a las instalaciones del elenco amarillo.
Revelaron que hay dirigentes del actual directorio que no están conformes con el traspaso del club a los cocaleros, “no quieren”, pero el resto de los miembros de la cooperativa de mineros, que estaba a cargo del club, aceptó.
La molestia también llegó a Quillacollo, sede del equipo. Organizaciones rechazaron el traspaso porque consideraron que significaría una “pérdida para el municipio”.
El Comité Cívico de la región detalló que la Alcaldía de Quillacollo tiene 1.500 trabajadores con abonos del equipo, que si se concreta el acuerdo, tendrán que ir hasta Villa Tunari, al estadio Bicentenario; a Entre Ríos, al estadio Carlos Villegas, y a Puerto Villarroel, al Evo Morales, para ver a su equipo.
También se adelantó que se pedirá un resarcimiento por un supuesto perjuicio al municipio, que invirtió más de un millón de bolivianos para que Palmaflor se instale en el lugar, según declararon autoridades de la Alcaldía.
Evo en la FBF
El senador Loza contó que después de concretar el plan de llevar fútbol profesional al Chapare, el otro objetivo de Evo puede ser llegar a la FBF.
“Alguna vez, el hermano Evo me contó que en Argentina le preguntaron si volverá a ser Presidente de Bolivia y él respondió que sí, pero de la Federación Boliviana de Fútbol, en broma respondió… Claro, en el futuro, si tenemos un club, tenemos todo el derecho de participar y por qué no, en el futuro, Evo Morales puede ser presidente de la federación”, relató Loza a la Red PAT. De momento, cocaleros coincidieron en que Morales será el titular de Palmaflor.
Aún no se firmó
“Faltan detalles”, confirmó Loza a la consulta de Página Siete sobre por qué aún no se firmó el convenio. En Cochabamba fue más explícito. “No queremos equivocarnos. Ojalá podamos firmar el documento final en los siguientes días, por temas legales”, reconoció. En la FBF, el vicepresidente Edwin Callapino contó que mientras no haya algo oficial, “no comentaremos sobre el tema. No es fácil”.
//FUENTE: PÁGINA SIETE//