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Más de tres días que la Policía de Mairana, está vigilada, amenazada y hostigada por movimientos sociales afines al MAS en Mairana, que asumieron férrea defensa del concejal masista, Gilberth Tapia Córdoba, imputado por propinar una feroz golpiza a su esposa. Los movilizados decidieron brindar total respaldo al agresor y dejar a un lado a la víctima a la que tildan de mentirosa.
El concejal fue detenido la madrugada del viernes pasado en su domicilio luego del llamado de auxilio de vecinos que alertaron que su esposa estaba siendo brutalmente golpeada. Los policías acudieron y al tratar de detener al concejal fueron agredidos a patadas, pero al final fue reducido y detenido para derivado a la Fiscalía.
El fiscal Jorge Caballero imputó a Gilberth Tapia por violencia familiar, doméstica y sicológica y pidió 120 días de cárcel en Palmasola por considerar que las pruebas en su contra eran fehacientes. La audiencia fue fijada en Santa Cruz, pero al momento en que los policías se aprestaban a sacar al concejal, grupos de movimientos sociales impidieron el traslado a Santa Cruz. Finalmente la audiencia se llevó a cabo en el juzgado de Samaipata.
El juez de Samaipata, Cimar Martínez, dictó detención por 60 días, pero en la cárcel de Vallegrande. Al juzgado ingresaron grupos de movimientos sociales que al escuchar el fallo frenaron que sea trasladado a la cárcel. Como el detenido estaba sin manillas dentro del juzgado, lo arrebataron de las manos de los policías y se lo llevaron con rumbo desconocido. Los policías encargados llegaron a su base de Mairana solo con las manillas.
La Policía identificó a un exrecluso, que estuvo preso por violencia, de encabezar la rebelión para evitar que su hermano Gilberth Tapia Córdoba, sea encarcelado por 60 días como lo ordenó el juez Cimar Martínez. Incluso la institución del orden indicó que el hermano del concejal y exrecluso amenazó a los pocos policías. “Él no se va a escapar”, dijo el exreo refiriéndose a Gilberth Tapia que ese día se fue con los movimientos sociales.
El concejal se presentó el domingo a la Policía de Mairana. Llegó con grupos de movimientos sociales y dijo que solo le falta presentar algunos documentos para irse a su casa.
Mientras tanto, los movimientos sociales que lo apoyan de forma amenazante pegaron carteles en la mismas oficias de la Policía con consignas defendiendo al concejal y rechazando la acusación de su esposa a la que tildan de mentirosa.
Informes de la Policía señalan que el concejal se resistió a ingresar a las celdas y permanece sentado en las oficinas, mientras afuera sigue la vigilia de los movimientos sociales. Incluso policías revelaron que los dirigentes y grupos hacen turnos, entran y salen a las oficinas de la Policía, hablan con el concejal y éste da órdenes de hostigar con carteles y petardos.
Otro informe policial también confirmó que su hermano de Gilberth Tapia estuvo preso en la cárcel de Vallegrande por violencia familiar contra su esposa y que ahora es el principal instigador que dirige la rebelión contra la Policía. Hasta el momento sigue en Mairana la vigilia y el hostigamiento a los pocos policías de esa región.
//FUENTE: EL DEBER//
