La terrible profecía de Malaquías

Malaquías de Armagh, monje benedictino nació en el seno de una buena familia en (Irlanda) en 1094, sacerdote en 1119, abad de Banoz en 1123, Obispo de Conoor en 1124 y finalmente Primado de Irlanda en 1132. En 1138 renunció al obispado y volvió a ser otra vez, monje benedictino. Falleció en Claraval (Francia) en 1148. Fue proclamado santo por el Papa Clemente III en 1190.

A Malaquías se le atribuye una terrible profecía, se trata de 112 lemas cortos en latín, “Propethia Sancti Malachiae Archiepiscopi”. Lo escribió en Roma en 1139 mientras pasó una “Summis Pontificubus”, una temporada invitado por del Papa Inocencio II.

Cada uno de los lemas corresponde a un papa e inicia con Celestino II nombrado papa en 1143 y termina con el actual Pontífice Francisco. Su sucesor será Petrus Romanus, es decir Pedro el Romano, “que apacenterá sus ovejas en medio de tribulaciones y cuando éstas hayan terminado, la ciudad de las siete colinas (Roma fue fundada sobre siete colinas) será destruída y el tremendo juez juzgará a los pueblos”. Esta destrucción de las siete colinas ha sido anunciada en otras profecías.

En la Basílica de San Pablo Extramuros de Roma, hay una serie de medallones que corresponden al número de papas y en la actualidad sólo quedan dos medallones libres.

Solamente en el siglo XII el texto de la profecía llegó a conocimiento público porque en 1595 otro monje benedictino, Padre Arnoldo de Wyon lo publicó en Venecia con el título de “Lignum Vitae”.

Para muchos, la exactitud de los lemas de Malaquías resultan ser sorprendentes, por ejemplo tomando en cuenta los últimos papas: Papa Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I, Juan Pablo II, y Benedicto XVI.  El santo dio las siguientes frases: para Juan XXIII “Pastor et Nauta” (Pastor y Navegante), Juan XXIII fue Patriarca de Venecia, ciudad  de navegantes, Pablo VI “Flor Florum”  (Flor de Flores) y  resulta curioso que en el  escudo de armas de Pablo VI sean presentes tres flores de lis, considerada la flor de las flores. Para Juan Pablo I Malaquías dijo: “Mediatate Luna”,  (de la media luna), Su nombre era Albino Luciani (luz blanca) y nació en la diócesis de Belluno (luna bella), fue elegido papa el 26 de agosto de 1978, la noche del 25 al 26 la luna estaba en (media luna) como referencia clara de la profecía. Juan Pablo II, “De Lavori Solis” (de la fatiga al sol), muchos aseguran que esta frase se refiere a su incansable labor alrededor del mundo, otros afirman que esto se debe principalmente a que Karl Wojtila nació un día de eclipse y murió otro día de eclipse. Por último Benedicto XVI tiene consigo el lema “De Gloria Olivae”, muchos afirman que esta predicción se debe a que Benedicto pertenecía al orden de los benedictinos, quienes reciben el apelativo de “olivetanos”.

La prefecía gozó de buena aceptación, tanto por parte del clero como de los fieles, hasta el siglo XVII cuando un jesuíta, Padre Claudio Francisco Menestrier publicó el libro “Refutación de la Profecías atribuídas a San Malaquías”.

La parte más inquietante de la profecía se refiere a Papa Pedro el Romano señalado como el último Papa, el nombre de Pedro nunca elegido por un Pontífice después de San Pedro es leído por muchos como

la imágen del Sumo Pontٌifice que tendría que combatir con los problemas del mundo actual y aseguran que no se trataría de una profecía del fin del mundo, sino, sobre el fin de la Iglesia Católica.

Sea como fuera, para muchos, esta profecía está  próxima a cumplirse, sobre todo al tomar en cuenta otras profecías como la del pueblo Maya.

  • RODOLFO FAGGIONI
  • PERIODISTA Y CORRESPONSAL EN ITALIA. MIEMBRO EFECTIVO DE PRENSA INTERNACIONAL
  • *NDE: LOS TEXTOS REPRODUCIDOS EN ESTE ESPACIO DE OPINIÓN SON DE ABSOLUTA RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO COMPROMETEN LA LÍNEA EDITORIAL LIBERAL Y CONSERVADORA DE VISOR21