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Las Comisiones Nacionales de Prevención de Abusos de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) presentaron este lunes en conferencia de prensa un informe que refleja los avances en su trabajo, dedicado a prevenir y erradicar abusos.
El objetivo de este informe, precisó el P. Diego Plá, secretario general adjunto de la CEB, es visibilizar “de manera clara todo el accionar de la Iglesia en esta situación”.
El sacerdote aclaró que la Iglesia trabaja desde 2018 para erradicar este flagelo, mucho antes de que salieran a la luz los abusos cometidos por el jesuita Alfonso Pedrajas y otros sacerdotes. Además, consideró injusto que “por un 3% —en Bolivia hay más de 700 sacerdotes— se manche la imagen de todos estos sacerdotes que trabajan diariamente con mucho sufrimiento, sin sueldo”.
El P. Plá hizo hincapié en la cifra de los abusos en el país: “En Bolivia tenemos una realidad, que es que uno de cada dos niños es abusado sexualmente. No podemos taparnos los ojos, es una realidad de verdad que tenemos que enfrentarla”.
La Coordinadora de la Comisión Nacional de Escucha, Lic. Nancy Loredo, por su parte, comentó que desde que se creó la Comisión en junio se conformó una red de delegados jurisdiccionales de escucha en las 18 diócesis de Bolivia, con quienes se prevé un encuentro nacional para fortalecer el trabajo y lograr una tarea coordinada.
En esa línea, manifestó su deseo de que puedan “tener un servicio transparente, de acceso fácil”, y que se pueda atender de manera oportuna y con calidad. Hasta ahora, informó, se recibieron siete casos de denuncia: tres por abuso sexual que datan de hace 20 años y los otros por abuso de poder y consumo de alcohol.
En el caso de la Comisión Nacional de Prevención y Formación, el coordinador, Lic. Jorge Fernández, explicó que son varias las actividades que se realizan.
La Comisión, detalló, ofrece material a nivel nacional, distribuido en las 1.389 unidades educativas, 659 parroquias y 207 obras de apoyo social en las que la Iglesia está presente. También se ofrecieron talleres de formación y capacitación con el personal de la Conferencia Episcopal Boliviana, sacerdotes, religiosos y religiosas y catequistas.
En cuanto al trabajo de la Comisión Nacional de Investigación, su coordinadora, Dra. Susana Inch, puntualizó sobre el trabajo que se lleva a cabo en la articulación del Derecho Canónico con el Derecho Penal Boliviano.
El objetivo de esta acción es “tener la mejor respuesta posible al ámbito estrictamente legal, a lo que se refiere a la atención y eventual acompañamiento de denuncias”, indicó.
En el ámbito canónico hay procedimientos con reformas que se han aprobado en la Santa Sede y que se van implementando en la Iglesia en el país; mientras que en el área penal se busca la forma de poder llevar a la justicia ordinaria los casos.
La Dra. Inch, quien también se desempeña como asesora legal de la CEB, explicó que en las siete denuncias recibidas se ha procedido en el ámbito canónico y en el ámbito penal: los casos están siguiendo la vía regular en la justicia ordinaria, y la Iglesia está presentando toda la información requerida.
A su turno, el Lic. Andrés Eichmann, coordinador de la Comisión de Comunicación, explicó que su principal tarea es la de dar a conocer el trabajo de las demás comisiones.
Dirigiéndose a las víctimas de abusos, expresó: “Lamentamos el actuar de las personas que han sido criminales y han traicionado la función que tenían, a la Iglesia y a las personas que tenían que cuidar y atender”, al tiempo que les aseguró su cercanía.
Luego le habló a la sociedad boliviana, a la que pidió su colaboración para combatir este flagelo: “Invito a las personas que sepan de abusos a brindar su colaboración para erradicar esto lo antes posible”, expresó.
Desde la Comisión, aseguró, continuarán atendiendo a los medios de comunicación, a entrevistas, como también a los requerimientos del Parlamento de la Asamblea Plurinacional, a la que fueron convocados para informar sobre su tarea.
