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Giovanna Arnez hizo ayer su última quimioterapia. Lo hizo estrenando uno de los sillones nuevos del área inaugurada para quimioterapia ambulatoria de Oncología del Hospital Clínico Viedma, en Cochabamba.
“Cuando un paciente con cáncer recibe el diagnóstico, lo primero que hace es llorar porque pensamos que el cáncer es un diagnóstico de muerte”, dijo, y recordó que tuvo experiencias no agradables con personal médico Hasta que pudo ingresar al Viedma. Ponderó la calidez y buen trato de enfermeras y médicos.
La de ayer fue la quimioterapia número 16, la última. Estuvo en tratamiento desde febrero de este año.
El sector donde antes estaba Terapia Intensiva es ahora para pacientes con cáncer. El personal médico, los pacientes y familiares expresaron su contento por el nuevo ambiente; sin embargo, coincidieron en el pedido de más ítems y personal especializado.
La responsable de Enfermería del Viedma, Irma Medrano, describió que la habilitación fue posible porque, ante la necesidad de beneficiar a los pacientes de Oncología y la falta de equipamiento, decidieron comprar sillones utilizando recursos económicos (35 mil bolivianos, 5 mil dólares) que estaban destinados a un congreso. Cada sillón costó alrededor de 2.900 bolivianos.
“Es así como lo hemos equipado este servicio, siempre velando por el bienestar y los tratamientos oportunos”, expresó.
La representante de la Asociación de Pacientes con Cáncer Carmen Vargas dijo que antes hubo pacientes que recibieron tratamiento fuera de tiempo porque no había espacio. Ahora, esa situación puede cambiar.
“Si nosotros logramos la atención temprana, no vamos a tener la necesidad de grandes quimioterapias, operaciones, el riesgo de que vamos a estar sufriendo cada día de que vamos a estar perdiendo algo”, acotó la paciente Arnez.
El director del Hospital Clínico Viedma, Eduardo Amaya, reconoció que antes se pedía a los pacientes que vuelvan “la otra semana”.
“Eso es doloroso. Había un espacio antes de solo 10 camas. Ahora, es un espacio más cómodo inclusive para el manejo de los elementos de quimioterapia que son altamente tóxicos. Debemos precautelar la labor de las enfermeras, del recurso humano y también de los pacientes”.
Por su lado, el representante del Servicio Departamental de Salud (SEDES) Rafael Mendoza expresó su deseo de que este este espacio sea temporal, mientras se construye la unidad de Radioterapia en el departamento.
MÁS ÍTEMS
La jefa de Servicios de Oncología del hospital Viedma, María del Carmen Torrico, expresó que aún hay “muchos pasos” por seguir, y pidió al coordinador de Hospitales de Tercer Nivel de la Secretaría de Salud de la Gobernación, Walter Tarifa, gestionar más ítems.
Tarifa manifestó que “hay que ir avanzando” y fortalecer el tema; explicó que se requiere un trabajo técnico y legal.
Arnez también pidió más cirujanos, enfermeras, personal especializado en Oncología.
Entretanto, la directora ai de Posgrado de Enfermería de la Universidad Mayor de San Simón, Martha Calvo, informó que junto a las enfermeras del hospital Viedma elaboran un proyecto de especialización para enfermería oncológica.
Amaya detalló que el número de pacientes de Oncología, con la ampliación del programa del Seguro Universal de Salud (SUS), oscila entre 200 y 300.
“Pero, esto se va multiplicando, yo diría, geométricamente. Como tenemos alto nivel en lo quirúrgico, en la rama médica, más ahora este tratamiento, seguramente va a haber un aumento del 30% al 40%”.
Los pacientes están conscientes de lo delicado de sus diagnósticos.
El tumor que tenía Giovanna Arnez creció de dos por dos centímetros a cinco por seis. Pero, ella sigue su tratamiento con disciplina y vigor.
“Todos los días pienso en el futuro”, aseguró.
En su familia, el cáncer dejó dolor. Su hermana menor, madre de cinco niños, murió con cáncer. Por eso, ella muestra energía, buen ánimo. Quiere estar sana.
Para hoy, tiene prevista una valoración con la médica que se hará cargo de su operación. Luego, se organizará para irse a La Paz, porque en Cochabamba no están todos los servicios que necesita.
“En mi vida había pensado en salir de Cochabamba y dejar a mi familia; pero, por la necesidad y falta de centros radiológicos, tengo que hacerlo. Pero, voy a salir de todo esto y voy a ayudar a mucha más gente”, dijo.
//FUENTE: DIARIO OPINIÓN//
