OSCAR ARCE
En un debate generado en un medio de prensa escrito en la ciudad de La Paz, entre Antonio Saravia con quien comparto el pensamiento económico, y por el otro lado con un planteamiento más político y de línea Internacional Socialista, Samuel Doria Medina, propietario del Partido Unidad Nacional, se intercambiaron criterios acerca de sistemas económicos y sociales en nuestro país.
El debate lo inició Doria Medina que trata de hacer ver a Antonio Saravia como un académico dogmático acerca de la propuesta liberal, pero termina como siempre expresando mal los términos y obviamente desconociendo la teoría económica real. Por otra parte, Guillermo Bretel, en un artículo publicado en otro medio de prensa, da su opinión acerca de las posturas de Saravia y Doria Medina, el cual incurre también en una posición ecléctica, que la aplaude, pero que tan solo responde a la tibieza y a la mediocridad y a la indecisión.
Mas allá de entrar en la tertulia del “dice que dijo o que no dijo”, prefiero defender la línea liberal del debate que siempre estará basada en la racionalidad y la lógica, fuera de posiciones subjetivas o de una creencia moral superior como lo hacen los de izquierda, los social demócratas o los de la internacional socialista. Debo rescatar el planteamiento del porqué la base liberal no es un dogma o una suma de propuestas académicas que solo van en pizarrón, ni tampoco el creer que para resolver los “problemas reales” se necesita de un ente con poder para “conducir” a un país, tal falacia es propia de personas que no tienen la capacidad de ver el contexto y del mismo modo Bretel cree que una solución a los problemas reales es un Estado de Bienestar como los grandes países nórdicos, desconociendo una vez mas el contexto económico.
Para empezar; la solución de los problemas no viene de un ente o un “líder” que nos diga cómo resolverlo, el ser humano ha demostrado a lo largo de la historia que es muy capaz de resolver problemas muy serios y que con iniciativa privada, ingenio y la necesidad de lucro ha permitido que hoy en día la calidad de vida sea muy alta, doy un ejemplo: en esta época una operación de amígdalas es una rutina tan sencilla gracias a los conocimientos, al acceso de las herramientas e insumos de última generación hechas por fábricas especializadas y producidas a bajos costos, antiguamente en esta cirugía no se utilizaba anestesia para proteger del dolor a los pacientes que iban a ser intervenidos para extirparles sus amígdalas, por lo que los médicos antiguos realizaban estas operaciones con la ayuda de asistentes y sujetadores de extremidades y los instrumentos eran rudimentarios casi artesanales. Es por ello que para dar solución a muchos problemas, el ser humano, gracias a su visión de obtener un beneficio ha hecho cosas maravillosas que han ayudado a la humanidad, es por eso que el mercado se mueve en ese sentido. Solucionar el problema de la pobreza no se trata de un redentor o una entidad que de comida y cobijo a los pobres, sino, un sistema que permita pueda mejorar su calidad de ingresos y la única forma sin tener que usar textos académicos o tertulias filosóficas es el libre intercambio de bienes y servicios, entre ellos el de demanda laboral y oferta laboral, es decir, hay una persona que tiene la capacidad de inversión y necesita personas que puedan ejecutar una labor determinada por ello se hace un acuerdo social de intercambio, lo que da por resultado una ganancia en ambas partes. Y esas partes no necesitan tener una línea ideológica, el sistema funciona porque es lo mas óptimo.
Ahora, sobre creer que hay empresas estratégicas estatales es entrar a una visión minimalista, pensar que no hay seres humanos capaces de crear empresas sobre esa base productiva es justamente no ver el contexto, es tan solo no observar el mundo que nos rodea, hay tremendas empresas privadas que hacen billonarias inversiones que generan movimiento económico en las regiones donde se hace esa inversión, el nivel de salarios es muy alto gracias a las economías de escala con las que operan estas empresas y el flujo económico tanto directo como indirecto genera obviamente un incremento en la economía de la región, por ende eso de empresas estratégicas estatales es la excusa para tratar de acaparar mas dinero estatal y manejarlo a diestra y siniestra para motivos netamente políticos y que no vendrán de los bolsillos del partido de turno.
Y por último esa percepción errada del Estado de Bienestar, y en este ejemplo realmente es pensar demasiado fantasioso, ya que el manejo de dinero público no es una simple operación de matemática o el uso de buenismos, una región siempre va a tener un montón de requerimientos en materia urbana y de dotación de bienes públicos, así de cómo manejar el erario nacional con las deudas y los gastos de operación que involucra a todo un país, para decirlo mas fácil, cuando hay bastante dinero se pueden hacer obras de caridad como las que hacen los países nórdicos que pueden financiar dichos actos caritativos gracias a su nivel de industria privada y condiciones ideales para inversión, pero un país pobre como el nuestro y que aparte está altamente estatizado, es decir casi todos dependen de algina manera de un beneficio o de dineros estatales, brindar esa caridad es una herida sangrante en el seno mismo del presupuesto fiscal. Entonces es pues una utopía querer llegar a un nivel alto de estado de bienestar como desean los grupos progresistas y de izquierda, son metas muy lejos de la realidad.
Una vez más las posiciones “eclécticas” solo reflejan una mediocridad y una tibieza en la toma de decisiones, el liberalismo no es una posición dogmática sino un sistema que funciona en el mundo. Y cuando ves a analistas optar por posiciones de centro y de paso creerse que por ser de centro es ser justo y equitativo es cuando uno se da cuenta de que los que viven en posiciones dogmáticas y en un mundo de sueños, nubes de tul y arcoíris son justamente los progresistas, los social demócratas y los de la Internacional Socialista.
OSCAR ARCE
Economista liberal y conservador social. Seguidor de la Escuela Austriaca de Economía.
*NdE: Los textos reproducidos en este espacio de opinión son de absoluta responsabilidad de sus autores y no comprometen la línea editorial Liberal y Conservadora de VISOR21