JIMMY ORTIZ
El 28 de junio 2022 se realizó una marcha patrocinada por el Comité pro Santa Cruz, con el slogan: “En repudio al narcotráfico y por una verdadera justicia”.
La tarde cruceña se pintó fría, en ese día de invierno. El surazo azotó la Tierra Camba, como lo sabe hacer en esta época del año. Sin embargo, el pueblo salió masivamente a las calles, para mostrar su descontento, por lo que está pasando en Santa Cruz y Bolivia.
Decía el presidente del Comité, Rómulo Calvo Bravo, en partes salientes de su discurso:
“La democracia directa está presente hoy aquí, porque la soberanía reside en el pueblo, nosotros somos los verdaderos dueños de Bolivia, las autoridades electas son transitorias. A estas autoridades venimos a exigirles, que cumplan con sus obligaciones constitucionales, de preservar la seguridad, la defensa del Estado y la vida.
No queremos sicarios del narcotráfico ni de la justicia, sembrando la muerte en Bolivia, y la impunidad; tampoco queremos ver a niños y jóvenes drogándose por nuestras calles. No podemos ser exportadores de la muerte blanca, Santa Cruz no lo acepta.
No queremos ver a madres que lloran y familias arruinadas, destruyendo de esta manera a nuestra sociedad. Exigimos vivir en un país con paz, progreso y bienestar.
Exigimos tener una justicia independiente, cumpliendo con nuestra Constitución y la Carta Democrática Interamericana, el Estado de derecho es innegociable.
Es imperativo que Bolivia tenga una justicia decente, que no sea un simple instrumento de persecución de los que pensamos diferente, una espada al servicio del gobierno, y un escudo que proteja la desbocada corrupción pública.
Nosotros estamos aquí hoy, porque queremos vivir en un país digno, sin narcotráfico, con una justicia al servicio de la verdad y nuestras familias protegidas por el Estado.
No queremos ser la República de la Cocaína, como nos llamó una revista extranjera. No aceptamos jamás la narcopolítica, que como en Colombia, llevó a Pablo Escobar al parlamento. Por eso no aceptamos parlamentarios ligados al narcotráfico.
Finalmente, queremos hacer un llamado a la comunidad internacional, UN PEDIDO DE SOCORRO: El pueblo boliviano no quiere convertirse en un Narco Estado, Santa Cruz no acepta ser un Narco Estado. Esta Tierra Santa no combina con gente maligna.
Solos no podemos, peor aun considerando que el gobierno nacional está más del lado del problema que de la solución. Esta bola de fuego comienza con la coca excedentaria y termina con sangre de los bolivianos.
Pedimos ayuda a la OEA, a la Comunidad Europea, a las Naciones Unidas; especialmente al Consejo de Seguridad, acudir a nuestro llamado, para que no reine la miseria, el hambre, el luto, la persecución ni el exilio en nuestro país”.
Las repercusiones de la marcha fueron muchas, pero la principal de ellas fue la destitución del Comandante General de la policía, Jhonny Aguilera.
Todo indica que esto será el inicio de una larga lucha, en la que el CpSC; a la cabeza del pueblo cruceño, marcará el rumbo.
JIMMY ORTIZ SAUCEDO
Abogado, politólogo cruceño.
*NdE: Los textos reproducidos en este espacio de opinión son de absoluta responsabilidad de sus autores y no comprometen la línea editorial Liberal y Conservadora de VISOR21