Denuncian malos tratos contra asegurados de Caja Petrolera

Una asegurada que pidió mantener su nombre en reserva denunció que la atención en la Caja Petrolera de Salud (CPS) de La Paz es “pésima”, porque tienen que peregrinar para lograr una ficha para su atención, y tras lograrlo deben aguantar los malos tratos de los funcionarios, la falta de información, medicamentos, entre otros.

“Es muy lamentable lo que pasa en la CPS, el trato que nos dan a los pacientes es por demás reprochable, no te tratan como personas, te tratan como animales, para ellos somos solo un número más. No son nada empáticos”, advirtió.

Lamentó que, para obtener los resultados, por ejemplo, del Papanicolaou, deben esperar cuatro meses y para que le programen otro tiempo. “Me hice un Papanicolaou en marzo, me dieron los resultados ayer, me dicen que tengo una infección y me dieron medicamentos. ¿Será normal medicarme por una infección de hace ocho meses?”, cuestionó.

Otro de los problemas que denunció la asegurada es la falta de profesionales, ya que el médico que la atendió le dio una orden para programar una ecografía y cuando se acercó a hacerlo, le informaron que debía volver al día siguiente porque la responsable estaba con baja médica.

“Una con suerte logra el permiso laboral para realizar consultas o programaciones médicas, encima nos topamos con que no está la funcionaria, ¿acaso no hay otra persona que pueda atender? Hay que recordar a los funcionarios que la atención no es gratuita, pareciera que nos hacen un favor, deberían contratar a personas que quieran trabajar, sus malos tratos nos hacen querer no volver a consulta”, lamentó.

Otra asegurada denunció que fue a emergencias por una lesión en su brazo, después de esperar, se fue a la farmacia para recoger los fármacos; sin embargo, la encargada le dijo que debe esperar porque “estaba trabajando”.

“Con todo el dolor que sentía, a pesar que me atendieron, me acerqué a la farmacia para recoger los medicamentos que me recetaron, pero la farmacéutica me pidió que le espere un minuto, porque estaba trabajando; esperé, pero porque el dolor ya era insoportable le pedí nuevamente que me atienda, me dijo que le espere porque estaba trabajando, ¿acaso su trabajo no es atender a los asegurados? Con mucha impotencia tuve que esperar las ganas de la trabajadora y creo que eso no está bien”, lamentó.

En ese marco, los asegurados que llegaron hasta este medio de comunicación pidieron que los profesionales sean más conscientes y tengan ganas de trabajar, porque de momento la manera en la que tratan a los pacientes deja mucho que desear.

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