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Evo Morales, el jefe cocalero que sueña con levantar una organización paraestatal de “movimientos sociales” en la región, denominada Runasur, ya tropieza con procesos penales en Perú, donde trató de establecer una “sucursal” del Movimiento Al Socialismo (MAS) durante y después de la campaña electoral que llevó a Pedro Castillo a una efímera presidencia.
Con una declaratoria de “persona no grata” y la prohibición de ingresar al vecino país, aunque el jefe masista asegura que ganó un reciente habeas corpus en Perú, se le suma la denuncia por el delito de sedición, en grado de complicidad, según expuso el congresista Jorge Montoya, en una nota difundida hoy, por Erbol.
El parlamentario presentó una denuncia contra Morales como cómplice en el delito de sedición, además de otros dos políticos peruanos a quienes acusa de traición a la patria. La Fiscalía de Perú admitió ese caso.
Aclaró que Morales no es el “protagonista principal” de la situación que atraviesa Perú, porque ese rol es de Pedro Castillo, quien fue destituido como presidente y detenido, luego de intentar disolver el Congreso.
“El generador de esta situación es Castillo y sus seguidores. El responsable de las muertes es Castillo y sus seguidores. Y la responsabilidad que tiene Evo Morales es haber participado cómplice de ellos, alentando a la gente a levantarse contra el Congreso, pero no significa que sea el protagonista principal”, explicó en entrevista con La Tarde en Directo de ERBOL.
El congresista acusó a Morales también de alentar el separatismo en Perú, promoviendo para ello la formación de una república de “Runasur”.
Sostuvo que Morales ha ingresado frecuentemente Perú para hacer proselitismo y que incluso pretendió reunir la Runasur en Cuzco, pero esto fue impedido. Dijo que la acción del exmandatario boliviano afecta la seguridad interna de Perú.
//FUENTE: ERBOL//
