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Desde la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Santa Cruz de la Sierra confirmaron que son varias las víctimas de agresiones en una guardería denunciada. Aseguran que ya se reveló el video en el que se observa claramente cómo una de las trabajadoras ata y amordaza al pequeño de tres años y nueve meses.
“Efectivamente, hay víctimas múltiples de este caso. Hasta el momento se han presentado dos padres de familia. Pero pedimos al resto de los padres de familia: si es que conocen de este tipo de hechos, pueden apersonarse en la Defensoría y se los ayudará”,pidió Juan Carlos Honor, jefe de Género, de la Defensoría de la Niñez.
La Defensoría se ha constituido en parte denunciante de este caso, del que ya se verificó, a través de los videos de seguridad, la agresión a la que sometían al niño en la guardería.
Por su parte, Alexander Salazar, jefe de la Defensoría, informó que se pedirá el cierre definitivo de este centro, “puesto que ha demostrado que no tiene la capacidad para atender a los niños bajo condiciones adecuadas y nuestra responsabilidad es velar por su seguridad”, apuntó.
Las autoridades investigan el caso por lesiones graves y leves luego de que la madre del niño denunciara el hecho ante los medios de prensa, después de reclamar y poner lo ocurrido en conocimiento a los encargados de la guardería.
El niño había sido amarrado a una silla con cinta adhesiva por el personal, también le cubrían la boca, y tras la denuncia, cuatro trabajadores fueron despedidos de la guardería.
El pequeño es hiperactivo, además tiene un grado de autismo leve, por lo que, según los encargados del cuidado de los niños, esta sería la forma de controlarlo.
El caso salió a la luz luego de que otro menor le comentara a su mamá lo que le hacían al niño de tres años.
Por su parte, el padre del niño que fue agredido relató cómo torturaban a su hijo en la guardería denunciada. Explicó, a través de un video que ya es viral en las redes sociales, cómo las educadoras y asistentes se ensañaban con el pequeño, al punto de amarrarlo y jalarlo de los pies.
“Mi hijo no es el mismo, la madre de mi hijo está deprimida; mi pequeño tiene terror de pasar por ese kínder y, lamentablemente, está justo al frente de donde vive”, contó el afligido padre.
//FUENTE: EL DEBER//