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El Tribunal Segundo de Sentencia de La Paz dictó ayer la sentencia condenatoria contra al menos 21 personas implicadas en la compra fraudulenta de 16 barcazas chinas y dos empujadores por un costo que supera los 28 millones de dólares, durante el gobierno de Evo Morales. El contrato y pago anticipado por las barcazas se hizo en 2009 y debían entregarse en 2010, pero esos bienes nunca llegaron al país.
Ayer se instaló la audiencia de juicio oral, en la que se presentaron los alegatos finales de las partes; luego los jueces deliberaron y dictaron condena contra los implicados en el caso, según información a la que tuvo acceso Página Siete.
Los implicados
El contralmirante Freddy Ballesteros, exgerente general de la Empresa Naviera Boliviana (Enabol), fue sentenciado a nueve años de prisión por contratos lesivos, conducta antieconómica e incumplimiento de deberes. Él fue involucrado debido a que en su calidad de gerente firmó un contrato con empresas coreanas-chinas para la compra de las barcazas y remolcadores en 2009.
El abogado Carlos Jang Hur fue sentenciado a 12 años de cárcel por enriquecimiento ilícito de particulares, contratos lesivos, asociación delictuosa e incumplimiento de contratos. El jurista, en reiteradas ocasiones, negó haber incurrido en esos delitos.
Carmen Rosa Gamez P., exdirectora jurídica de Enabol, fue sentenciada a siete años de prisión y Lee Young S. (extranjero prófugo) a 12 años de cárcel. Todos ellos recibieron una condena elevada de años.
El resto de los implicados, entre oficiales subalternos, extranjeros prófugos y civiles, recibieron la condena de uno a cuatro años de cárcel, de acuerdo a su grado de participación.
Varios de los sentenciados ya habrían cumplido con la mayor parte de sus condenas, a raíz del tiempo que demoró este proceso y que en ese lapso unos estaban con detención preventiva y otros con medidas sustitutivas. Por ejemplo, Ballesteros estuvo recluido desde 2013 y con medidas sustitutivas desde 2020.
Aquellos que ya cumplieron con su condena quedarían libres previo algunos trámites y autorizaciones judiciales.
También hay al menos ocho ciuadanos, la mayoría extranjeros, que fueron juzgados en rebeldía, quienes deberán cumplir la pena una vez sean capturados.
El hecho
El caso Barcazas se destapó el 2012 con la revelación de graves irregularidades en la suscripción del contrato entre Enabol y las empresas coreanas-chinas subcontratadas por la compañía General Marine Business el 2009 para la construcción de 16 barcazas y dos empujadores.
El contrató se firmó en 2009. Enabol pagó al contado y por adelantando 28 millones de dólares, de ese monto, tres millones debían ser destinados al transporte de los bienes.
La compra se hizo en el marco del proyecto “Implementación del empujador/remolcador fluvial multipropósito en el canal Tamengo e Hidrovía Paraguay-Paraná”, aprobado ese mismo año por el presidente Evo Morales y debía ser cumplido en 2010, pero no ocurrió eso.
Se activó un proceso penal en el país contra los mencionados y también hubo un litigio internacional por una presunta adquisición irregular. En la vía internacional, el Tribunal Marítimo de Qingdao reconoció a Bolivia como propietaria de esos bienes en 2019, pese a eso las barcazas y remolcadores nunca llegaron al país.
//FUENTE: PÁGINA SIETE//
