CIDH habla que “golpe” tenía “el fin de derribar al gobierno”; oposición presentará queja

Redacción VISOR21

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió un comunicado en el que “condena” el denominado “golpe de Estado” en Bolivia, del pasado 26 de junio. Para la oposición, ese pronunciamiento es una mala señal en la búsqueda de la verdad acontecida en el país y anunció la presentación de una queja formal ante la Organización de Estados Americanos (OEA).

“La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condena el intento de golpe de Estado por parte del Ejército de Bolivia y llama al inmediato e irrestricto respeto de la institucionalidad democrática, al mantenimiento del orden constitucional y a la protección de los derechos humanos”, señala el comunicado.

La CIDH agrega que aquella fecha “un sector del Ejército de Bolivia movilizó vehículos militares y ocupó espacios públicos en La Paz, específicamente, en la Plaza Murillo. Ello, con el fin de derribar al gobierno democráticamente electo e instalar un nuevo gabinete”.

Para la diputada por Creemos, María René Álvarez, el pronunciamiento de la CIDH es una “pésima señal” sobre los hechos acontecidos en plaza Murillo y cuestiona bajo qué criterios y pruebas se afirman esos extremos.

“Bolivia exige una investigación profunda sobre estos graves hechos que han dañado la imagen del país y han destrozado nuestra democracia. Una investigación interna, a través del Legislativo en el marco de sus competencias de fiscalización; y una investigación externa con organizaciones que actúen con independencia y libres de contaminación ideológica”, expresó mediante sus redes sociales.

La diputada adelantó que la bancada de Creemos presentará una queja formal ante la OEA y su secretario general, Luis Almagro, a quien ya se le remitió una carta, la pasada semana, en la que se pide mayor rigurosidad para el monitoreo de la información y las versiones sobre el “golpe” o el “autogolpe” promovido en Bolivia, según la oposición, desde el propio régimen de Luis Arce.

“Por la envergadura de la situación y el mal manejo de la institucionalidad en Bolivia, incluso con relación a las observaciones y recomendaciones efectuadas por diversos organismos, se hace necesario un acompañamiento internacional para identificar a la totalidad de los responsables, además de coadyuvar en la necesidad de encontrar salidas democráticas a la crisis por la que atraviesa Bolivia y que son consecuencia de la irresponsabilidad y angurria de poder de Luis Arce, Evo Morales y del Movimiento al Socialismo”, señala parte de la carta enviada por senadores y diputados de Creemos el pasado sábado.