- Redacción VISOR21
Chi Hyun Chung vuelve a la arena electoral, luego de un sorpresivo tercer lugar en la votación de 2019, y esta vez apela a su raíz asiática para plantear que Bolivia asegure relaciones con el bloque económico de países como Corea del Sur, Japón y ‘la China capitalista’, y se aleje de la influencia comunista de naciones como Cuba y Venezuela.
El Dr. Chi, de 54 años, es médico, empresario, docente universitario y pastor evangélico, por ello se considera capitalista, conservador y pretende devolver la fe cristiana a la administración del Estado. Su lema “¡Chi puede!” marca una campaña acompañada por jóvenes declarados como conservadores que le acompañan en la gira por los nueve departamentos del país.
En entrevista con VISOR21, Chi Hyun Chung habla de ideología, fe y economía, con un marcado rechazo al sistema actual de partidos políticos alienados al socialismo y comunismo en Bolivia.
¿En qué espectro de la política se encuentra: izquierda, derecha, liberal, social demócrata, conservador, socialista?
“Soy conservador y soy libertario, en otras palabras, soy capitalista. Por ello, nuestro gobierno iniciará una función facilitadora para el pueblo emprendedor, porque el gobierno no debe dar trabajo a la gente sino son las empresas las que dan trabajo y una empresa depende de los clientes. Siempre el gobierno socialista es dirigido para controlar al consumidor y usuario, pero el capitalismo promueve la productividad para que el consumidor escoja la alternativa que mejor le convenga, y los consumidores no tienen partido político.
En Bolivia siempre hubo el comunismo y el socialismo, porque es la mejor manera de promover la idiosincrasias de la dependencia estatal en la que se promueve la ignorancia, la desestabilización del país en la forma económica, social y política con la finalidad de poder saquear nuestros recursos naturales; así es en el mundo, como en África donde otros países promueven ese instrumento que se llama socialismo y comunismo”.
¿Qué lo motiva a volver a una candidatura presidencial?
“Estoy agradecido con la población boliviana, yo nací en Corea del Sur, viene a Bolivia a mis 12 años, soy hijo de pastor evangélico presbiteriano y que Bolivia me haya aceptado y educado, yo he aprendido los valores y principios de Bolivia. Con todas esas oportunidades que me ha dado el país, desde la óptica cristiana y empresarial, que yo pueda ingresar a la arena política es un privilegio. Bolivia me da la confianza para que el país tenga una alianza estratégica con Corea del Sur, que será una alianza histórica porque ahora el país hizo alianza con Cuba y Venezuela y ya vemos los resultados. También vamos a hacer alianzas con Estados Unidos y Europa, con (Javier) Milei de Argentina también puede ser nuestro amigo y (Nayib) Bukele de El Salvador también, siempre que cambie algunas acciones que tiene”.
¿Cómo pretende llegar a ganar la Presidencia en las elecciones de este año?
“Para eso tengo tres comisiones importantes: la comisión de 2019, cuando hubo fraude y nosotros teníamos que tener diputados y senadores, entonces tenemos todos esos votantes a favor.
Número dos, tenemos la comisión de todos los militantes cristianos. Cuando Evo Morales huyó, la gente dijo que fue por cobarde, pero eso fue resultado de las oraciones de la iglesia cristiana que salió en oración, no solamente por las pititas sino que se oró y arrodilló clamando para que Bolivia recupere su libertad y sea un pueblo para Cristo. Pero un partido político se adueñó de esa lucha y una persona, (Luis Fernando) Camacho, se adueñó de todo y ese fue un engaño para todo el pueblo. Vamos a recuperar la fe cristiana y que la Biblia vuelva no solo a Palacio de Gobierno sino al Palacio de Justicia, a la educación, que seamos cristianos y se acabe esa idolatría, esa perversidad de la ideología de género, el aborto, los asesinatos, no puede ser que sigamos así. Hay que recuperar la fe y el amor entre los bolivianos.
La tercera comisión es la internacional, que la vengo trabajando por ejemplo en Corea del Sur que me tiene como referencia, así como Japón tenía a Fujimori. ¿Por qué no se puso el puerto de Chancay en otro país que no sea Perú?, porque antes ya hubo un trabajo importante de Perú con Japón. Entonces, Bolivia tendrá toda la comisión asiática una vez que trabaje con Corea del Sur y luego viene Japón, viene China que es capitalista, viene Taiwán. Mientras Rusia está en guerra y la India está en quiebra, a los países asiáticos les interesa el comercio, la ciencia y la investigación y esa es una oportunidad que Bolivia debe aprovechar con esos países emergentes capitalistas”.
¿Cómo puede salir el país de la crisis económica a corto plazo?
“Hay que aprobar la importación libre de dólares. Lo que envían en dólares se podrá recuperar en dólares y se debe establecer el libre mercado de los dólares en Bolivia.
También se debe permitir la libre importación de combustibles como diesel y gasolina. Existen empresas que quieren traer combustibles, pero les ponen impuestos, eso es el colmo, les cobran garantías. A una empresa que quiere traer valor de cien millones de dólares de diesel, el gobierno le pide que ponga ese mismo monto de garantía, más la coima y la corrupción se desalienta la inversión privada. Los comunistas creen que ellos son los únicos salvadores, con el presidente sentado en su palacio y esa es una aberración política. También se puede producir el biodiesel, que acá se produce, pero se desincentiva la producción, en Bolivia se compra el litro a los extranjeros a Bs 5 y a los productores no quieren pagar ni Bs 4. Esa es una aberración y no se sanciona a esta gente que se corrompe y lucra con la administración del Estado”.
Se habla mucho de unidad y alianzas de la oposición ¿Cuál su posición al respecto?
“Hablar de unidad es decir todos se sientan en la misma mesa, pero lo que queremos es la transparencia electoral. Entre los opositores, ¿quiénes son opositores si todos son comunistas, socialistas, pro Evo y pro Arce? Hay que cambiar el menú, no a los cocineros; ¿cómo vamos a comer la misma milanesa si lo que queremos es cambiar a otro tipo de comida? y ese cambio de menú es girar al capitalismo y que se vuelva a los valores cristianos para el país”.
¿Cuál es su propuesta política para lleva al país a ese cambio de “menú”?
“Un nuevo país, una Bolivia república federal, porque ahora hay autonomías pero cada autonomía tiene que tener la productividad propia de cada departamento y de los municipios. ¿Dónde están las empresas municipales que generen trabajo si todo el tiempo está dependiendo de poco y casi nada de la plata del IDH (Impuesto Directo a los Hidrocarburos)?. De esa plata quieren vivir municipios y gobernaciones y por eso pelean por un censo para que les caigan más centavos, pero con todo el dinero que se invirtió en 20 años de IDH dónde están los resultados. Si fueran empresas, cada año tienen que demostrar resultados, porque si uno invierte 250 millones de dólares, como pasa en Santa Cruz, tiene que mostrar productividad, pero cada año salen con déficit, dicen que les falta dinero y buscan más recaudaciones con impuestos. Simplemente usan recursos para mantener más funcionarios y no se mejoran asfaltos, caminos, turismo y otras políticas de productividad.
Las gobernaciones y los municipios no están cumpliendo la autonomía, entonces la república federal plantea la descentralización del Banco Central, también la Aduana, el IDH se debe repartir en 70 por ciento a cada departamento según su producción y sus recursos naturales, y reasignar los impuestos. El gobierno central debe dedicarse a la seguridad y a la educación, nada más”.
Menciona a Dios ¿Dios y política es compatible?
“Cuando Dios bendice a un país, lo hace cuando el pueblo clama a Dios y que su presidente tenga temor de Dios. En Bolivia, desde Palacio de Gobierno omitieron la presencia de Dios, igual en el palacio de justicia. La justicia es la conciencia de Dios, pero sin esa conciencia lo que domina es el egoísmo y la soberbia de los hombres, la corrupción, la conveniencia. Un gobierno sin Dios, un docente o un médico sin Dios es a lo que nos ha llevado este gobierno y la influencia del mundo comunista. Por eso vamos a recuperar esa relación con Dios”.
