EL DEBER.- Emocionada por llevar a su hijo a clases, así estaba María Antonieta Salgueiro Zambrana, una mujer de 42 años, pero desafortunadamente no llegó a destino. La mujer subió al micro de la línea 98, interno 15, con su hijo de siete años, quien tiene capacidades especiales, y cuando estaba a bordo del vehículo, el chofer arrancó con velocidad, y al estar la puerta abierta, se desestabilizó y cayó con su pequeño a la calle.
Salgueiro quedó inmóvil en el piso y los pasajeros que descendieron para auxiliarla se dieron cuenta de que había muerto de forma instantánea. El fuerte golpe que sufrió en la cabeza, provocó el desenlace fatal.
Los servicios de emergencia y la Policía levantaron y llevaron el cadáver a la morgue judicial de la Pampa de la Isla, mientras que el niño fue trasladado a una clínica y afortunadamente no sufrió daños y recibió el alta médica.
Martín Padilla, el esposo de María Antonieta, pidió justicia para su esposa y exige que esta tragedia sirva de lección para los conductores del transporte público, quienes por correr provocan la muerte de sus pasajeros en accidentes que pueden evitarse.
“Ahora estamos velando a mi esposa en la casa de sus padres y recién el viernes por la mañana vamos a sepultarla, estamos esperando que mis dos hijas mayores regresen de Chile para que puedan despedirse de su madre”, indicó consternado el esposo.
Sus hijas que viven en Chile al enterarse de la tragedia de su madre, emprendieron el viaje de retorno al país, además de otros hermanos de la fallecida. Todos ellos desafortunadamente volverán a ver a María Antonieta para darle su último adiós.
El accidente se produjo aproximadamente las 7:35 del miércoles, 2 de febrero, final de la avenida Cumavi entre octavo y noveno anillo, zona de la Villa Primero de Mayo.
María Antonieta se había preparado muy temprano para llevar al primer día de clases a su hijo, al Centro de Educación Especial Nuevo Amanecer, donde asistiría por tercer año consecutivo.
“Mi esposa y mi hijo subieron al micro y el chofer ha acelerado de golpe seguro por marcar a tiempo su tarjeta. Eso ocurrió como a cinco cuadras en una curva y la calle de tierra”, comentó el esposo.
Martín cuenta que su hijo tenía clases de pintura, la mamá alistó una polerita para que pueda mancharla con colores porque era su materia preferida.
El chofer fue identificado como Luis Fernando Mercado Vargas, está aprehendido y este viernes será su audiencia cautelar.
DEDICACIÓN
María Antonieta, eventualmente, realizaba trabajos de repostería, buscaba recaudar dinero para el sostenimiento de sus hijos e incluso especializarse en el cuidado de su pequeño con Síndrome de Down.
“Por sacar adelante a nuestro hijo, ella se abocaba a tomar cursos de manualidades, pintura, lengua de señas, educación física, incluso tuvimos que aprender fisioterapia para que nuestro hijo tenga un desenvolvimiento físico óptimo“, contó Martín.
Es por ello, que su dedicación a sus hijos y especialmente con el pequeño con capacidad diferente, era muy cuidadosa.
“Yo soy zapatero, hago calzados en Los Pozos, y mi esposa también realizaba trabajos eventuales, pero era muy dedicada a nuestros hijos, siento impotencia por lo que sucedió, los choferes de micros deben ser más responsables”, concluyó.
//FUENTE: EL DEBER//
