El exdiputado paceño y actual jefe nacional del MNR, Luis Eduardo Siles, afirmó este domingo que el caso más grave de corrupción del gobierno de Evo Morales y del MAS era el desvío de dinero del Estado a cuentas particulares a través del desaparecido Fondo Indígena Originario Campesino (Fondioc) que sirvió para “financiar proyectos fantasmas”.
De esa manera se refirió a las consecuencias de la muerte del ex director del Fondioc, Marco Antonio Aramayo, señalando que se trató de un “asesinato judicial a un preso político” quien para colmo de denunciante pasó a ser denunciado sin tener ni un solo indicio de que hubiera obrado mal.
Manifestó que, pese a que el caso estuvo siete años en investigación, hasta ahora el Ministerio Público y la justicia no procesaron a la inmensa mayoría de los que se beneficiaron con el “robo de esos dineros” ni siquiera recuperaron el 10% y el “resto está irremediablemente perdido”.
Siles entiende que en el caso Aramayo hay una triple connotación: corrupción, traición e injusticia. Explicó que hay corrupción porque se habla de una cifra no menor a los 170 millones de dólares que fueron desviados a cuantas de casi 2.000 individuos y que en la mayoría no solo cobraron diezmos, sino que no hicieron las obras para lo cual pidieron ese dinero.
Recordó que hay el caso de un pueblo fantasma que algunos dirigentes se inventaron para sacar plata; otro caso fue de algunas ovejas a las que les pintaron el rostro para hacerlas a parecer como “ovejas negras” de raza y también hay el hecho de que del mismo Fondioc salieron dineros para llevar gente a la posesión de Evo Morales.
Indicó que la exdiputada del MAS Lidia Patty, que “se especializa en provocar y es la denunciante del juicio sobre el supuesto golpe de estado, también está sindicada de haber recibido un millón y medio de bolivianos y también quedará en la absoluta impunidad”.
Observa que hay traición porque el MAS utilizó a Aramayo y a los indígenas para sonsacar montos millonarios que acabaron en el bolsillo de un grupo de dirigentes y hay injusticia porque después de escarmentado en la cárcel hasta matarlo, ahora se todos se solidarizan.
Dijo que lo único que hizo Aramayo se fue denunciar el inmenso tráfico de influencias que encabezó la exministra de Desarrollo Rural Nemesio Achacarlo. “Realmente lo que le hicieron a este hombre no tiene nombre, esto no es justicia, esto es venganza”, afirmó.
//FUENTE: ERBOL//