Las cuatro dictaduras que tenemos en América Latina han seguido el mismo libreto con algunas variables para consolidarse en el poder, cuando la economía les sonreía producto de los buenos precios de las materias primas, abusaban de elecciones, referéndum, revocatorios y otros inventos que los hacia ver ante la comunidad internacional como regímenes democráticos y ganadores de elecciones.
Y cuando se acabó esa época de bonanza empezaron a montar unas obras de teatro electoral y lo extraño es que los actores políticos saben que la elección es una farsa, no denuncian que los dictadores son candidatos, jugadores y árbitros de la contienda electoral.
En Bolivia, no se respetó el resultado de un referéndum revocatorio, en Venezuela tampoco. En Nicaragua a los candidatos presidenciales de la oposición se los tomo presos, se los exilios, se les despojo de su nacionalidad, en Venezuela no dejaron inscribirse a la candidata con mayor popularidad del país como María Corina Machado y el régimen permitió la inscripción de Edmundo Gonzales pensando que María Corina no iba a participar en la campaña, se equivocaron porque ella tomo la batuta y sin importarle su rol se jugó por la libertad de su pueblo.
En Bolivia, Venezuela y Nicaragua han hecho fraude electoral, han desconocido la voluntad popular y todos tienen presos políticos y exiliados..
Estos países junto con Cuba, se han convertido en estados mafiosos, donde la corrupción y el narcotráfico son utilizados para fortalecer sus proyectos políticos y los patrimonios de los jerarcas del gobierno.
La lección que sacamos de lo que está pasando en Venezuela, es que para sacar a una dictadura del poder se necesita la UNIDAD DE LA OPOSICION, esta unidad debe incluir todo el arcoíris democrático, desde los socialdemócratas, nacionalistas, liberales, centro derecha, derecha democrática, un control electoral eficiente, un discurso que enamore a la sociedad para poder ganar las elecciones a pesar del fraude sistémico y todas las trampas que la dictadura va a poner. Recuperemos la democracia, y luego cada quien a defender democráticamente su ideología, Si en esta elección priorizamos el tema ideológico, no habrá patria para nadie y la dictadura al igual que en Cuba, Venezuela y Nicaragua, se consolidará plenamente y tendremos un éxodo de gente, sobre todo jóvenes similar al de Venezuela, o Cuba.
¿Es suficiente ganar las elecciones? NOOOOOO y lo resalto porque mientras nosotros los demócratas debemos buscar cómo hacer respetar los resultados electorales. ellos están preparando las trampas, porque son una mafia disfrazados de políticos que se han encumbrado en el poder, no son de izquierda, indigenistas, pachamamistas, ni revolucionarios, ellos están para mantenerse en el poder a cualquier costo, para proteger la corrupción, eso nos enseñan los dictadores.
Estuve acompañando a los Venezolanos el 28 de julio en Miami, desde aquí se monitoreaba el control electoral, habían trabajado varios años formando delegados electorales para el control de las mesas, los recintos y el envío de datos a los servidores que no estaban al alcance de la dictadura, ese trabajo el día de las elecciones, le permitió a Edmundo y a María Corina, mostrarle al mundo las actas electorales y el resultado final que la dictadura no pudo mostrar y que ante el mundo democrático lo ha deslegitimado, pero como manejaban la Corte electoral, les ordenaron que den como ganador a Maduro. Igual pasa en Bolivia, manejan la Corte electoral y han hecho unas elecciones judiciales amañadas donde el Tribunal Constitucional, donde mantienen mayoría con los autoprorrogados y son los que han dictado vía fallos las últimas medidas políticas más importantes para consolidarlo a Arce como candidato, han generado una jurisprudencia fatal. Desde ahí pueden digitar los resultados electorales y habilitar o inhabilitar candidaturas.
Todavía estamos a tiempo de salvar nuestro país, dependemos de la madurez y el desprendimiento de nuestros líderes políticos, quienes están obligados a no fallarle al pueblo.
VIVA BOLIVIA LIBRE!!!
- GUIDO ÁÑEZ MOSCOSO
- EXDIPUTADO NACIONAL, EXMINISTRO DE ESTADO. ASILADO POLÍTICO.
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