Se comienza a calentar el escenario político en Bolivia. Una vez confirmada su candidatura presidencial, el empresario y ahora político Branko Marinkovic cuestionó la falta de propuestas reales por la oposición que recientemente anunció un acuerdo de unidad para enfrentar al MAS, el partido de Gobierno, en las elecciones presidenciales que se realizarán en agosto de este año.
Para él, la llamada “unidad” no representa un cambio verdadero. No es más que una estrategia superficial que ha demostrado ser ineficaz durante las últimas dos décadas.
“No es unidad, es un junte de intereses para tratar de llegar al gobierno porque piensan que esta vez sí le pueden ganar al MAS. Eso no es así. Es una mentira para el pueblo boliviano”, afirmó en el programa radial de EL DEBER Radio: ¡Qué Semana!
Es más, Marinkovic cuestionó el repentino acercamiento de los lideres de oposición con Luis Fernando Camacho, el gobernador cruceño detenido preventivamente en Chonchocoro. Según el empresario, “los tres están usando a Camacho, aprovechando que no es candidato lo están usando. Cuando les conviene lo visitan” denunció. Considera que ni Carlos Mesa, ni Tuto Quiroga, ni Samuel Doria Medina se preocuparon por la situación del gobernador antes de lanzarse a la carrera electoral, “Y ahora no salen de Chonchocoro”, redondea.
Marinkovic es un exlíder cívico cruceño que estuvo más de 10 años en el exilio durante la presidencia de Evo Morales. El exmandatario lo acusó de liderar un supuesto grupo separatista para dividir al país, pero esta denuncia nunca se comprobó en los estrados judiciales.
Tras la caída de Morales, en 2019, el empresario retornó al país e incluso formó parte del Gobierno de transición de Jeanine Áñez, como ministro de Economía y Finanzas. Su figura no pasa desapercibida en el ambiente político: es querido y resistido por igual por las diferentes tendencias partidarias.
Un proyecto nuevo para Bolivia
Tras su llegada, decidió saltar a la arena política. Su visión de país es liberal. Inicialmente no tenía un respaldo partidario, pero en diciembre de 2024, Acción Democrática Nacionalista (ADN), lo presentó como precandidato.
Una vez confirmado este acuerdo, Marinkovic, sostuvo ante los micrófonos de EL DEBER Radio que el camino hacia un verdadero cambio requiere de una transformación estructural basada en un proyecto de país completamente distinto. Entre sus propuestas, destaca la privatización de empresas estatales, la reforma del sistema judicial y la reducción del tamaño del Estado.
“El Estado boliviano puede reducirse a la mitad y ser mucho más eficiente. Tenemos demasiados ministerios, gastos innecesarios y una burocracia que asfixia a los emprendedores”, señaló.
También enfatizó la importancia de estabilizar la economía y abandonar el actual modelo económico que calificó de socialista, lo que, para él, es sinónimo de empobrecedor.
“El socialismo no ha funcionado en Bolivia ni en ningún lugar del mundo. Lo que saben hacer es gastar el dinero de los demás y generar pobreza”, dijo.
Renovación política y rechazo al sistema actual
Marinkovic abogó por un cambio generacional en la política, rechazando las figuras que han dominado el panorama político durante décadas. Criticó el uso del término “unidad” por los líderes opositores tradicionales y cuestionó la falta de ideas innovadoras.
“Bolivia necesita un cambio de ideología, un cambio radical. La vieja política no puede solucionar los problemas del país porque son parte del problema.”
Además, planteó la necesidad de eliminar la reelección presidencial para fomentar la renovación política y evitar que las mismas figuras perpetúen su poder.
Ante la proximidad de las elecciones, Marinkovic asegura que no necesita alianzas forzadas para avanzar con su propuesta. Resaltó que está trabajando en construir una estructura política sólida para enfrentar el desafío electoral de manera independiente.
“Sin estructuras no se ganan elecciones. No se trata de juntar nombres, sino de construir un proyecto con visión y capacidad para transformar el país”, dijo.
Por último, expresó que Bolivia tiene un potencial enorme que solo puede ser aprovechado con medidas audaces y transparentes, y llamó a los bolivianos a rechazar el continuismo político que, según él, ha llevado al país a una crisis profunda.
- ///FUENTE: EL DEBER///