Mano propia, la visión del director Gory Patiño sobre los reportajes de Roberto Navia

Mario Vega es un fiscal que llega a Villa Nogales, una población en el trópico boliviano, un destino sin ley, donde los ciudadanos tienen que tomar la justicia por su cuenta, a veces de forma brutal. Por eso, Vega deberá hacer todos los esfuerzos posibles para evitar que la gente linche a un grupo de jóvenes injustamente acusados de robar un camión.

Esa es la trama de Mano Propia, la nueva película de Gory Patiño que llegará el jueves 19 de septiembre a los principales cines del país. La cinta está inspirada por un caso real, que fue investigado por el premiado periodista Roberto Navia, quien publicó el reportaje Tribus de la Inquisición.

“Cuando leí el reportaje quedé atrapado, tanto por la historia misma, como la forma de narrar casi cinematográfica de Roberto. En mi mente vi la posibilidad de hacer una cinta y, después, logré contactarme con Navia para pedirle permiso”, recordó Patiño en una entrevista con Visión 360.

Tanto el periodista como el director trabajaron en el guion. No fue tarea fácil, ya que la historia verídica contiene elementos muy delicados que tuvieron que ser cambiados, como los nombres de los involucrados y de los lugares, ya que el hecho real ocurrió en Ivirgarzama. Así que si bien Mano Propia está basada en hechos reales, es más que nada una historia ficticia.

“A mí me gusta el periodismo de la postguerra. Es decir, ver qué pasa después que las cámaras registraran los acontecimientos, indagar en las consecuencias de los mismos y su efecto en la sociedad. Eso es lo que pasó con el caso de Ivirgarzama”, explicó a Visión 360 Navia.

Entre la mañana del 1 y la madrugada del 2 de julio de 2013, los habitantes de esa población chapareña quemaron vivas a seis personas, acusadas de ladrones. Lastimosamente no serían ni los primeros, ni los últimos.

“Es un problema nacional que se debe a la falta de confianza en las autoridades y a la falta de seguridad. Es un problema vigente en el que la turba toma el control de la gente y hace que retrocedamos hasta la inquisición, dejando dolor y muerte. Es por eso que es un tema fascinante que debe ser explorado”, explicó Patiño.

Por la naturaleza del caso la cinta transcurre entre el drama de procedimiento policial y el western. “Tiene un caso criminal, pero también a un agente de la ley que se enfrenta a una población desconfiada, que lo ve como un extraño y, peor aún, un aliado de los criminales”, agregó el cineasta.

Para llevar la historia a la gran pantalla, Patiño contó con un “equipo de lujo”. La productora es Claudia Gaensel, una de las más prolíficas de los últimos años, mientras que su compañero Leonel Fransezze y Samuel Doria Medina asumieron la producción ejecutiva.

El filme está protagonizado por Freddy Chipana y Alejandro Marañón, y el elenco también cuenta con artistas de la talla de Bernardo Rosado, entre otros. Se filmó en el norte paceño, en Palos Blancos, y los pobladores colaboraron en el rodaje.

  • ///FUENTE: VISION 360///