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El exministro de Defensa del gobierno de Jeanine Áñez, Luis Fernando López, afirmó este martes que “volvería a poner el pecho” por el país las veces que sea necesario, después de conocer la acusación en su contra por genocidio por las masacres de 2019 en Sacaba y Senkata.
“Con la frente en alto, orgulloso de ser boliviano, patriota, padre de familia! Volvería a poner el pecho por mi país las veces que sea necesario. Los tiempos de Dios son perfectos”, escribió en su cuenta en la red social X, antes Twitter.
Junto al exministro López, fueron acusados la expresidenta Añez, otros exministros, exjefes militares y policiales. La Fiscalía anunció que pedirá 30 años de cárcel en el juicio oral y contradictorio.
El exministro se encuentra refugiado en Brasil junto con otros exfuncionarios del gobierno de Áñez, tras haber abandonado el país en noviembre de 2020.
La Fiscalía presentó el lunes la acusación formal por los hechos de Sacaba y Senkata, considerados como “ejecuciones sumarias” por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Internacionales (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En el puente Huayllani de Sacaba, el 15 de noviembre de 2019, las fuerzas conjuntas de la Policía y Fuerzas Armadas intervinieron una movilización de organizaciones sociales que pretendía llegar a la ciudad de Cochabamba. Diez personas fallecieron por impactos de arma de fuego.
Mientras, el 19 de noviembre, efectivos policiales y militares se desplazaron de manera conjunta a la Planta de YPFB, en Senkata, y sus inmediaciones, para frenar a los manifestantes que buscaban ingresar a este predio. Según la acusación de la Fiscalía, se aplicó un plan de acciones “desproporcionadas” de represión a través del uso de armas con municiones de guerra y vehículos mecanizados blindados contra manifestantes civiles, dejando 10 muertos y varios heridos.
//FUENTE: CORREO DEL SUR//