.
Trabajadores que iniciaron trabajos para el dragado de la laguna Alalay se llevaron un gran susto, al percatarse que en la parte seca de la reserva natural había restos humanos.
Hasta el lugar llegaron los agentes de homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para realizar el levantamiento legal del cuerpo y lo trasladaron a la morgue judicial del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), para que le practiquen la autopsia de ley y determinar la causa de su deceso.
La Asociación Accidental Ecodragados se adjudicó el dragado, pero el 3 de septiembre suspendió el trabajo porque una de sus socias, Servitodo, debe tramitar los permisos para el transporte y traslado de los lodos y sedimentos de la laguna Alalay.
“Se ha dado la orden de proceder a la empresa y a mediodía se va a hacer una inspección con el Alcalde, evidentemente, quedan algunos temas pendientes pero para poder ganar tiempo se ha comenzado”, decía más temprano, el secretario de Infraestructura, Gustavo Navia.
La laguna depende en gran medida de las precipitaciones, las cuales disminuyeron debido a la crisis hídrica. Por ello, los niveles de agua bajaron provocando malos olores y una creciente contaminación, indicó el secretario de Planificación de la Alcaldía de Cochabamba, Marcel Panoso.