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Un exjefe de la constructora brasileña Odebrecht afirmó el jueves en un juicio por lavado de activos en Perú que la empresa aportó dinero para las campañas de casi todos los que fueron elegidos presidentes del país en las últimas dos décadas.
En una audiencia virtual desde Brasil con un tribunal peruano, Jorge Barata reconoció la entrega de dinero en dólares en efectivo y en transferencias a empresas para los candidatos a la presidencia y para aspirantes al Congreso de Perú.
Entre ellos mencionó las campañas de los expresidentes Alan García (2006-2011), Ollanta Humala (2011-2016) y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) y para la candidata presidencial Keiko Fujimori y para la exalcaldesa de Lima Susana Villarán.
“Me acuerdo del monto de señor Humala, que eran tres millones, de la señora Fujimori, que era como un millón; de la señora Villarán, tres millones. Pero los otros exactamente no me acuerdo”, afirmó Barata ante la pregunta del fiscal del caso.
El exdirectivo refirió que los aportes se traducían en “ventajas” en la licitación de obras públicas para Odebrecht.
Barata se presentó en calidad de testigo en el caso de presuntas entregas de sobornos para la construcción del Metro de Lima, como parte de un proceso de lavado de activos que involucra a funcionarios y políticos del país.
La construcción de Metro de Lima por parte de Odebrecht se realizó durante el segundo gobierno de García, que se suicidó en el 2019 cuando la policía llegó a su vivienda para arrestarlo en medio de las investigaciones sobre el caso.
La trama de Odebrecht también ha involucrado al expresidente Alejandro Toledo (2001-2006), que cumple desde abril un arresto preventivo por 18 meses mientras es investigado por presuntamente recibir 35 millones de dólares de Odebrecht a cambio de ganar la construcción de una importante carretera.
En la misma prisión de Toledo se encuentran el exmandatario Alberto Fujimori (1990-2000), sentenciado por abusos a los derechos humanos y corrupción y el expresidente Pedro Castillo que intentó en diciembre cerrar el Congreso de forma ilegal.
Odebrecht, foco del mayor escándalo por sobornos en Brasil y que salpicó a varios gobiernos de Latinoamérica, reconoció en un acuerdo judicial en Estados Unidos el 2017 que pagó millones de dólares para ganar la concesión en varios países de la región.