Putin abre la puerta a la invasión a Ucrania al reconocer territorios separatistas

 

Vladimir Putin, el presidente de Rusia, finalmente hizo lo que países europeos y Estados Unidos le pidieron expresamente que no hiciera: reconocer la independencia de Donetsk y Lugansk. Dos territorios separatistas prorrusos al este de Ucrania que se autoproclamaron autónomos en 2014, los cuales los últimos días han registrado decenas de bombardeos.

Donetsk y Lugansk están en la región de Donbás, fronteriza con Rusia. Por eso los análisis apuntan a que ambos territorios podrán facilitar una invasión de Putin. Este 21 de febrero el mandatario ruso anunció la decisión que «desde hace tiempo caía por su propio peso: reconocer de inmediato la independencia y la soberanía de la República Popular de Donetsk y de la República Popular de Lugansk».

nmediatamente firmó tratados de amistad y asistencia mutua con los líderes de Donetsk, Denís Pushilin, y de Lugansk, Leonid Pásechnik. Según la agencia AFP, el reconocimiento prevé el despliegue de militares rusos en el marco de una «misión de mantenimiento de la paz». Esto podría ser la entrada oficial de Rusia a Ucrania.

Esto no solo afecta al mapa ucraniano en términos prácticos, también constituye «una flagrante violación del derecho internacional, de la integridad territorial de Ucrania y de los acuerdos de Minsk», aseveró el presidente del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, Charles Michel.

Detonó el rechazo internacional

Estados Unidos pondrá manos a la obra con una Orden Ejecutiva para prohibir «nuevas inversiones, comercio y financiamiento por parte de estadounidenses hacia, desde o en las llamadas regiones Donetsk y Lugansk de Ucrania». Los departamentos de Estado y del Tesoro tendrán detalles adicionales próximamente, indicó un comunicado de la Casa Blanca.

La Unión Europea (UE) anunció sanciones contra los involucrados en la decisión anunciada por Putin. Un rechazo que se extendió con Josep Borrell, alto representante para la Política Exterior y de Seguridad de la UE, y Roberta Metsola, presidente del Parlamento Europeo. Francia, Alemania, Suecia, Dinamarca, Noruega y Finlandia también condenaron el reconocimiento.

No se sabe qué pasará con la reunión que habían planificado para el 24 de febrero Serguéi Lavrov y Antony Blinken, líderes diplomáticos de Rusia y EE. UU., respectivamente. Pero trascendió que el presidente Joe Biden habló por teléfono con su homólogo ucraniano Volodímir Zelenski, luego del pronunciamiento de Moscú.

«Derramamiento de sangre recaerá sobre Ucrania»

Mientras la escalada de tensión se mantiene —la semana pasada desencadenó en más de 40 bombardeos según el Ministerio de Defensa de Ucrania— Putin pidió a Kiev «poner fin inmediatamente a las acciones militares». Lo que el mandatario ruso pretende ignorar es que los bombardeos pudieron haber comenzado desde los territorios separatistas.

Dijo que si estos no se detienen, «toda la responsabilidad por la posible continuación de derramamiento de sangre recaerá totalmente sobre la conciencia del régimen que gobierna el territorio de Ucrania».

Pero sus palabras no quedaron ahí. En una nueva muestra de autoritarismo, el presidente ruso dijo que tomará medidas de seguridad ante el rechazo de la OTAN y de EE. UU. de garantizar que Ucrania no se integre a la Alianza Atlántica.

Vladimir Putin quiso dar la imagen de que él está rodeado y no al contrario, al citar la presencia de soldados de la OTAN y de misiles en el país vecino, así como la supuesta colaboración bélica con EE. UU. en el Mar Negro. «Nos han engañado. Una detrás de otra ha habido cinco olas de ampliación de la OTAN», añadió.

//FUENTE: PANAM POST//