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Un informe sobre la situación de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS) revela prácticas de prebendalismo, contrataciones sin justificativo, negligencia jurídica y otros aspectos que pusieron en riesgo la continuidad de los servicios, así como la estabilidad económica financiera y administrativa de la entidad. Todo esto durante la gestión de Bladimir Iraizos como interventor.
El informe fue realizado por el interventor suplente Jaime Martínez y tiene fecha 10 de mayo. El mismo se elaboró después de la suspensión de Iraizos como interventor, cuando fue involucrado en un presunto hecho de pago de soborno.
En el documento, al que accedió ERBOL, se señala que en febrero se incrementó 16 trabajadores en EPSAS y un movimiento de personal en el cual se disminuyó 10 trabajadores de planta y se aumentó siete eventuales.
Asimismo, se registró aumentos con relación al personal eventual contratado mediante invitación directa.
El informe advierte que en los contratos se adjuntaron “avales de organizaciones sociales que promueven y definen estas contrataciones”.
“Esta situación crea un clima de dependencia y prebendalismo de la gestión de la Empresa respecto de intereses particulares”, afirma el reporte.
En plano laboral, también el texto advierte que hay reclamos de pagos de bonos que podrían generar procesos contra la empresa.
Asimismo, EPSAS tiene procesos por reincorporación y pagos de beneficios sociales con sumas altas. Como ejemplo, se menciona un caso que llega a un millón de bolivianos ya retenidos a la empresa por orden judicial, pero también se tienen procesos por sumas como Bs500.000 o Bs300.000.
El informe señala que, a pesar de esa “situación por demás critica”, el interventor Iraizos continuó con las desvinculaciones sin la debida justificación generándose así nuevas demandas laborales y pago de beneficios sociales en contra de EPSAS.
En ese sentido, el informe advierte una total falta de patrocinio diligente y negligencia de la defensa jurídica de EPSAS, porque no se ha demostrado resultados para la empresa.
“Por ejemplo tenemos 19 causas penales que datan de diferentes gestiones desde 2012 en adelante en muchos de ellos con rechazo por falta de pruebas y negligencia de los abogados y el propio jefe jurídico”, menciona el texto.
Relación prebendal con sectores
También el informe señala que se han identificado serios conflictos con sectores sociales “emergentes de una deficiente e irresponsable gestión administrativa” en EPSAS.
Observa que en algunos casos de conflictos se llegó a firmar convenios cuyo objeto y finalidad no tienen ninguna relación con el rubro de la Empresa, como la construcción de canchas sintéticas, caminos y sedes sociales.
“Esta forma de encaminar las relaciones con sectores sociales de importancia para el servicio, basada en intereses personales y prebendales, ha ocasionado la división y conflictos al interior de comunidades, sindicatos agrarios y otro tipo de organizaciones sociales que se constituyen en riesgo para el servicio”, agrega el texto.
Contrataciones
Según el informe, a febrero de este año EPSAS tuvo un incremento del 188% en contrataciones (72 contratos), los cuales no se encuentran debidamente justificados y significan un gasto adicional a la empresa.
Al mismo periodo, “se identificó un incremento de los gastos operativos del 33,64%, con una tendencia creciente que puede poner en riesgo la sostenibilidad operativa de los servicios de agua potable y alcantarillado sanitario”.
Riesgo del servicio
Además de que los gastos arriesgan el servicio, el informe indicó otros aspectos que generan esta alerta.
Señala, por ejemplo, que existía un ineficiente manejo y control del personal y retrasos en los plazos de ejecución de los procesos de contratación de bienes y servicios, lo cual influye en la ejecución de los proyectos de inversión del sistema de agua potable y alcantarillado sanitario.
Otro aspecto observado, es que los mismos trabajadores alertaron que en determinadas áreas no contaban con materiales que todos los días son utilizados por la parte operativa de la empresa.
Incluso, la División de Mantenimiento no estaba recibiendo los vehículos para realizar el trabajo correspondiente, debido a que no había firma autorizada para poder comprar los repuestos necesarios.
A la luz de estas observaciones, el informe llega a la siguiente conclusión: “En atención a las consideraciones expuestas, se puede concluir que la deficiente gestión administrativa de la Empresa a cargo del Interventor Ing. Gonzalo Bladimir Iraizos Escobar, ha generado un clima de inestabilidad laboral y conflictividad social, que ponen en riesgo no solo la continuidad de los servicios, sino también la estabilidad económica financiera y administrativa de la Empresa”.
Actualmente, Iraizos ya fue alejado del cargo de interventor de EPSAS y enfrenta investigaciones por presuntamente pagar soborno a un dirigente, a cambio de que desmovilice a sus bases que pedían su renuncia.
//FUENTE: ERBOL//
