Calvo cuestiona el “discurso de odio” de Arce y Camacho alerta sobre nueva oleada represiva contra Santa Cruz

Tras la promulgación de la Ley de Aplicación de los Resultados del Censo de Población y Vivienda en los Ámbitos Financiero y Electoral, la dirigencia cruceña se pronunció destacando los logros del paro indefinido, que se extendió por 36 días en Santa Cruz. Sin embargo, también surgieron duros cuestionamientos al discurso del presidente Luis Arce.

A través de un video, el gobernador Luis Fernando Camacho, afirmó que el mensaje de Arce desvela una línea de acción represiva contra Santa Cruz, puesto que acusó al pueblo cruceño y a sus autoridades de numerosos crímenes, “como si fuéramos un pueblo violento que por puro gusto generamos un paro”.

“El discurso del presidente pretende imponer un relato sobre una supuesta voluntad violenta de los cruceños para justificar nuevas operaciones contra Santa Cruz. Queremos la pacificación del país y del departamento para seguir trabajando y produciendo, pero el discurso del presidente anuncia una nueva oleada represiva contra Santa Cruz, principalmente contra sus dirigentes”, sostuvo Camacho.

En la misma línea, el líder cívico, Rómulo Calvo, desde las puertas de su casa, donde cumple un arresto domiciliario, habló con los medios de comunicación y cuestionó el “discurso de odio” del presidente del Estado, Luis Arce Catacora, “a su propio estilo”, la mañana de este viernes cuando dio a conocer que la ley del censo ya estaba promulgada. Además, le hizo un llamado a la consciencia para que “se dé cuenta que fue su Gobierno el que falló” y llevó al pueblo a exigir sus derechos en las calles.

“Yo creo que el presidente debe ponerse en posición de todos los bolivianos y no seguir fomentando el odio como lo hizo su excompañero político Evo Morales, sino que debe sentirse satisfecho que ha escuchado al pueblo boliviano y no amenazar y perseguir al pueblo cruceño que solo ha exigido un derecho”, enfatizó.

Durante su mensaje, Arce dijo que su Gobierno insistió en el camino del diálogo, pero la dirigencia cruceña “en todo momento truncó los acuerdos” para continuar con los “bloqueos forzosos”, donde hubo cientos de heridos, una denuncia de violación grupal, agresiones a mujeres, periodistas y vulneración de muchos derechos, además de un enorme daño a la economía, superando los 1.200 millones de dólares en pérdidas para Santa Cruz.

“Hay otra Santa Cruz que no es tomada en cuenta en estas decisiones de los comités, y a la que se enfrentó de manera violenta y racista, hablo de la Santa Cruz de obreros, indígenas, gremiales, transportistas, estudiantes, adultos mayores, personas con discapacidad, que realizar un cabildo por su derecho al trabajo y a la alimentación, cuyas voces pretendieron silenciar, con una lógica dictatorial, de quien se oponía era traidor, y debería tener muerte civil”, expresó Arce.

A lo que, Calvo le respondió que “no se olvide que, el que cercó al departamento, el que trajo policías para atentar contra la población cruceña, el que dejó sin combustible, el que cerró las válvulas de gas y el que trajo hordas para enfrentar a los bolivianos fue su Gobierno y nosotros hemos seguido de forma pacífica exigiendo un derecho”.

En ese sentido, Camacho también le recordó al mandatario que “fueron los grupos de choque masistas que golpearon periodistas y fueron los grupos parapoliciales los que gasificaron a una bebé cruceña de meses” en los enfrentamientos durante el paro por el censo.

“Cruceñas y cruceños, el paro ya concluyó, es momento de seguir trabajando, pero lamentablemente vemos que el Gobierno no ha cambiado la página y quiere seguir confrontando al departamento, estemos preparados para seguir defendiendo la democracia del autoritarismo”, concluyó Camacho.

//FUENTE: EL DEBER//