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Ante la crisis desatada por el paro cívico cruceño y su impacto directo en el sector cárnico nacional, los matarifes de Cochabamba se proveen de ganado de “confinamiento”, procedente del Valle Alto y “criollo”, de tipo lechero de la zona sur.
El representante de los matarifes en Cochabamba, Néstor Vela, explicó que el ganado de confinamiento es aquel procedente de Santa Cruz, pero engordado en la Llajta. Este se encuentra en el Valle Alto, sobre todo en Punata, Cliza, Tarata y Arani.
Su producción tiene fines de aprovechamiento cárnico; es decir, destinado exclusivamente a la producción de carne para consumo. Vela explicó que este tipo de ganado requiere cerca de dos años para salir al mercado; y es comparado con la producción de carne de pollo en granja. Es decir, tiene una alimentación especial y su tiempo de engorde es veloz.
En contraposición, el ganado criollo es básicamente lechero. “Son las vacas que ya no dan leche o que ya han cumplido su ciclo de vida o ya no están aptas”, explicó. Este tipo de ganado proviene de la zona sur de la Llajta, donde se concentra el sector lechero local.
A diferencia del ganado de confinamiento, este crece de forma natural, alcanzando hasta 15 años de vida.
El dirigente de los matarifes aseguró que ahora “mucha gente se dedica a esto”. Es por ello que, ante cualquier anuncio de paro, el precio se dispara.
“El precio se ha incrementado no porque hemos querido, sino por la oferta y la demanda y la especulación de precios. Entre 2 y 3 bolivianos ha subido (el kilo) y eso afecta a la población (…). Pedimos al Gobierno una pronta solución y que los cívicos asistan al diálogo”, solicitó, preocupado, el dirigente cárnico.
A pesar de que los carniceros se abastecen de la producción local, por ahora, este lote “es insuficiente”, reveló el sector. Ante ello, los matarifes se declararon en “emergencia”. Demandan una solución inmediata.
250 CABEZAS DIAS
Conforme a datos del rubro, el 90% de la carne que se comercializa en Cochabamba procede del oriente. Por día, solo en Cercado se requieren entre 200 y 250 cabezas de ganado, en un promedio de 250 a 300 kilos, por res.
Es decir, la urbe cochabambina consume hasta 75 mil kilos de carne de res al día. “Todos los días carneamos”, enfatizó Vale, tras resaltar la importancia del abastecimiento diario.
Debido al paro indefinido en Santa Cruz, la carne no llega a Cochabamba en las condiciones normales, hace 13 días. Esto ha obligado al sector a volcarse a la producción local.
Por su parte, el administrador del matadero municipal, Walter Torrez, informó que el faenado de reses bajó de 200 a 70 cabezas, por día. Proyectan que hoy se faenarán las ultimas, provenientes de la capital cruceña.
MENOR CALIDAD
Uno de los empresarios cochabambinos dedicados a la producción de carne en Santa Cruz y su venta en Cochabamba le informó a OPINIÓN que, producto de este desabastecimiento, muchos carniceros locales “venden carne criolla como cruceña”.
Explicó que esta carne es de menor calidad, pues es dura y procede de ganado lechero. Además, en muchos casos, es ganado flaco y, en situaciones extremas, “de lo que pillen”.
Adelantó que, en los siguientes días, el kilo podría subir 1 boliviano más. Así, este alimento proteínico llegaría a reportar un incremento de hasta 4 bolivianos, de continuar el paro indefinido en Santa Cruz.
Por ahora, el sector gastronómico cárnico no ha reportado escasez o incremento de precios en Cochabamba.
//FUENTE: DIARIO OPINIÓN//
