Miembros de la autodenominada “primera línea” de Colombia, banda que fue acusada de vandalizar al país durante las protestas del año pasado, están enquistados en las comunidades de Bogotá. Con campamentos instalados en cinco puntos de la capital, delimitados con alambres y vigilancia permanente, mantienen el entrenamiento subversivo a menores de edad y el adoctrinamiento en las zonas colonizadas.
Un reportaje de Noticias RCN confirmó que los encapuchados ocupan un lote de propiedad privada por la constructora Las Galias ubicado entre los barrios Class Roma y Vegas de Santa Ana, entre la localidad de Bosa y Kennedy, que sirve como base de sus operaciones con los grupos de Patio Bonito y el Portal de las Américas.
Quienes están radicados allí participaron en el campamento de «primera línea» junto a la Universidad Distrital de Kennedy. Después del desalojo que hubo, migraron hacia Dindalito, Las palmas, al igual que Bella Vista. Estas personas ahora forman parte del escuadrón que estuvo en salón comunal de Guacamayas en San Cristóbal, los Altos de la Estancia.
En la parte externa de las vivienda hay elementos utilizados por el grupo con tendencia violenta como cascos y escudos para confrontar a las autoridades y una bandera de Colombia con las siglas de PL barrio Roma así como grafitis de odio hacia la Policía, machetes y bombas molotov.
“A los niños los ponen a hacer prácticas que, si la Policía llega, se tiene que morir alguien de la Policía”, señaló un líder comunitario al medio colombiano, quien denuncia “el incremento de la delincuencia, los atracos, el consumo. Ya no hay tranquilidad, uno sale y no sabe si puede ocurrir algo”.
¿Qué pasa con la alcaldesa Claudia López que no hace nada? pregunta el movimiento Salvación Nacional en Twitter.
La mentira de López
Hay respuestas. La divulgación de las imágenes de los campamentos contraria el reporte del consejo de seguridad de la Alcaldía de Bogotá que encabeza Claudia López.
En su informe presentado a finales de enero vociferó que “en Kennedy, al igual que en el resto de la ciudad, se registran índices de reducción en materia delictiva. Por ejemplo, mientras que en diciembre de 2021 se registraron 18 homicidios, durante enero se contabilizan cinco y los casos de hurto a personas, que en diciembre fueron 1.120, han caído a 330 en el presente mes”.
López sonreía entonces. Lo atribuyó además al despliegue de 167 uniformados más en la zona y al trabajo con los conjuntos residenciales de Kennedy pero con su aparente mueca culpó a los vecinos del sector por “ayudar a encubrir a los vándalos, evitando la captura por parte de la Policía como parte de la politiquería”.
Los vecinos la desmienten en redes sociales. Mientras tanto, Humberto Amin, vicepresidente del Concejo de Bogotá, destaca en Twitter que “Claudia López está más preocupada por su alianza política con Gustavo Petro, que por los terroristas de la primera línea que siguen preparándose en la localidad de Kennedy para delinquir en contra de la fuerza pública”. Incluso comparte imágenes de la inseguridad en la zona.
Petro ofrece indulto
Retirarse de los terrenos no está en los planes de los manifestantes cuando el candidato presidencial izquierdista, Gustavo Petro, les promete que “habrá un proceso de indulto para quienes han sido perseguidos tan injustamente, simplemente, por manifestarse”. Desde hace dos semanas rueda el video en redes sociales con su oferta judicial que potencia las invasiones en Bogotá.
Es un respaldo obvio del aspirante a la Casa de Nariño en tiempo de campaña pero significa que “Petro, de ser presidente, indultará a quienes secuestraron Cali y el Valle, generaron bloqueos, asesinaron policías y civiles y destruyeron sistemas de transporte público. Es clara la cercanía del petrismo con los actos que buscaron poner en jaque la democracia”, aseguró el senador Gabriel Velasco.
Sergio Pastor alias “19” principal líder del grupo social que se tomó la estación Portal Américas del TransMilenio ubicada en Kennedy, detenido en la Cárcel y Penitenciaría con Alta y Media Seguridad de Valledupar acusado de propiciar hechos de violencia, tortura y alteración del orden público desde el paro nacional abril de 2021, celebra el pacto de Petro.
Y como él, festejan Fernando Urrea y Santiago Márquez Charry, ambos detenidos en la Cárcel y Penitenciaría con Alta y Media Seguridad de Girón en Santander porque en el fondo es una evidencia más de afinidad ideológica entre Petro y los líderes de los desmanes.
Petro lo admite. “No nos da pena decir que somos la primera línea, sino que también, somos la primera línea del cambio en Colombia”, así resuelve la cercanía. Incluso, al lugar donde llega a promover su candidatura asegura que arriba “la primera línea de la lucha contra la corrupción”.
//FUENTE: PANAM POST//
