RODOLFO FAGGIONI
En la ciudad de Turín, (Italia) del 22 al 26 de septiembre, se celebrará la 14a edición de “Tierra Madre”, el mayor encuentro de la red mundial de Slow Food, la organización fundada en París en 1989, sin fines de lucro, que desde su creación ha defendido siempre las culturas locales frente a los progresos estandarizados impuestos por lógicas modernas de producción. En la presente edición de “Tierra Madre” los delegados serán 3.000 provenientes de 150 países y el lema elegido, “RegenerAction” representa perfectamente el reinicio después de casi tres años debido a la pandemia.
“Tierra Madre” es una definición que evoca el concepto de tierra entendida come madre y divinidad, e introduce por primera vez a nivel internacional un nuevo actor en el campo de la producción alimenticia: una producción agroalimentaria alternativa a la impronta industrial. En “Tierra Madre” se encuentran representantes de un modelo sostenible de producción y distribución de los alimentos, cuidadoso de los recursos ambientales, los equilibros del planeta y la calidad de los productos.
El vínculo a “Tierra Madre” está formado por todos los que deseen intervenir para preservar, animar y promover métodos de producción alimentaria sostenible, en armonía con la naturaleza, el paisaje y la tradición. Festivales gastronómicos, mercados campesinos, eventos culturales y conferencias son algunas de las iniciativas para esta edición de la jornada mundial que celebra el alimento bueno, limpio y justo producido localmente.
Slow Food quiere aprovechar la energía de su movimiento global reuniendo a productores y activistas alimentarios de todo el mundo. El objetivo del evento es diseñar un futuro diferente para la alimentación, uno que tome forma a través de las elecciones diarias individuales, mediante los esfuerzos colectivos de las comunidades y las políticas de las instituciones tanto públicas como privadas. El tema del evento, RegenerAction refleja perfectamente la invitación a tomar parte activamente de este cambio. “Tierra Madre” será una gran ocasión para explorar cuestiones que han salido a la luz debido a la actual crisis medioambiental, climática y la salud pública, por no mencionar la geopolítica.
La Fundación Slow Food está presidida por Edward Mikiibi un joven ugandés, agrónomo tropical con Licenciadura en Ciencias de la Agricultura. Mikiibi ha jugado un papel clave en el desarrollo del proyecto “1000 huertos en Africa”. Su trabajo ha sido reconocido mediante distinguidos galardones en honor a su contribución desinteresada a un sistema alimentario sostenible, justo y equitatativo.
En el año 2013, en ocasión del “Año Internacional de la Quinua” este producto fue protagonista principal en el “Salón del Gusto” organizado por Slow Food, reconociendo las prácticas ancestrales de los pueblos andinos que han preservado la quinua como alimento para las generaciones presentes y futuras, mediante conocimientos y prácticas de vida. La quinua provenía de la organización “Apepa” de la provincia de Aroma que se dedican principalmente a la producción de quinua. “Apepa” forma parte de la AOPEB que es la Asociación de productores ecológicos de Bolivia que han participado a eventos de carácter internacional.
RODOLFO FAGGIONI
Periodista y Corresponsal en Italia. Miembro efectivo de Prensa Internacional
*NdE: Los textos reproducidos en este espacio de opinión son de absoluta responsabilidad de sus autores y no comprometen la línea editorial Liberal y Conservadora de VISOR21