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Krixus perdió su pata trasera derecha en un accidente fortuito. Intentó cruzar una vara en un parque y quedó enganchado, desafortunadamente sus ligamentos resultaron afectados y la única salida fue la amputación.
Una amiga de la familia del perro, de 8 años, se puso en contacto con Susana Vargas, docente de la materia Órganos Artificiales y Prótesis de la Universidad Católica Boliviana (UCB) de La Paz en busca de ayuda para su mascota, y luego de seis meses de trabajo Krixus pudo dar sus primeros pasos con la prótesis que fabricaron un grupo de 15 estudiantes.
Cuando los jóvenes universitarios, que cursan la materia dictada por Vargas, fueron a la casa de Krixus, encontraron un animal bastante activo, sin limitaciones para moverse y jugar, activo y amigable, y con una familia comprometida en su recuperación a poco tiempo del accidente (que ocurrió a finales de 2021).
Se dividieron el trabajo en tres grupos: diseño, medidas y ensamblaje de la prótesis, realizaron varias visitas para lograr su objetivo. “En la segunda visita, el animalito se notaba más amistoso con nosotros, al principio se cansaba de estar parado. Hicimos un molde, tuvimos pruebas, ajustamos la parte de la prótesis que hace contacto con el muñón con un cinturón para que no se salga con el movimiento de la pata”, comenta Susana.
Ibeliz Manríquez, la dueña de Krixus, estuvo a su lado durante la entrega oficial de la prótesis en las instalaciones de la UCB en Obrajes, en La Paz. Krixus camina nuevamente con sus cuatros patas, ahora con una artificial.
//FUENTE: EL DEBER/ UCB//
