–
Las principales instituciones del Beni durante un acto cívico patriótico, en la plaza de Trinidad, conmemoraron la Batalla de Nanawa, que se libró durante la guerra entre Bolivia y Paraguay.
Inicialmente las autoridades procedieron a izar las banderas, departamental y nacionales, en el acto organizado por el Comando División del Ejército con asiento en Trinidad.
“Constituye un alto honor hacer uso de la palabra en este importante acto, en el cual me referiré a Nanawa, batalla de la Guerra del Chaco”, dijo el oficial de Logística de la Sexta División, Tcnl. Marco Antonio Candia.
Comentó que Bolivia desde su creación ha sido protagonista de varias guerras internacionales; siendo su pecado original ser grande en extensión territorial, riquísima en recursos naturales y con un porvenir esplendoroso.
Esta situación despertó la codicia de vecinos que, sin excepción, mediaron territorialmente alrededor suyo, con ansias de apoderarse de alguna parte de nuestra integridad territorial.
El combate de Nanawa se desarrolló en dos fases, que como resultado del cambio o modificación de la situación estratégica que se realizó a favor de nuestro Ejército a partir de diciembre de 1932, deteniendo la ofensiva paraguaya en el km. 7.
Del 20 al 26 de enero de 1933, fue el primer intento del Ejército boliviano por capturar el estratégico fortín de Nanawa que le abrían las posibilidades de avanzar hacia el norte, o en su defecto, avanzar hacia el este para salir al río Paraguay a la altura de la ciudad de Concepción.
“A la hora indicada los cañones y ametralladoras bolivianas iniciaron el fuego contra Nanawa, una hora más tarde, los aviones de la gloriosa Fuerza Aérea Boliviana lanzaban bombas sobre el fortín, los infantes iniciaron su avance por los tres sectores establecidos”, rememoró.
La defensa paraguaya consistía en extensas trincheras mimetizadas, poderosas filas de alambradas y nidos de ametralladoras dotadas de periscopios lo que les permitía hacer fuego desde el fondo de las trincheras y cientos de nidos de ametralladoras ubicadas estratégicamente en los árboles, en los pajonales o en los campos.
Además, el enemigo estaba defendido por innumerables armas automáticas, artillería 105mm y con una guarnición reforzada por más o menos 3.000 hombres.
Los regimientos bolivianos, con derroche de heroísmo avanzaron decididamente, sobre el terreno defendido por los paraguayos, sin embargo, al atardecer del día 26 nuestras tropas no pudieron alcanzar su objetivo que era la ocupación de Nanawa.
//FUENTE: LA PALABRA DEL BENI//